31 de octubre: Origen y significado de Halloween
La noche del 31 de octubre se celebra en muchos lugares del mundo la Noche de Halloween, también conocida como Noche de Brujas o Noche de Difuntos.
Halloween se celebra cada 31 de octubre, un día ideal para preparar nuestros disfraces y decorar las casas y las calles con motivos terroríficos.
Halloween es una derivación de la expresión inglesa «All Hallow’s Eve», y que significa «Víspera de Todos los Santos».
Halloween se trata de una celebración moderna que hunde sus raíces en dos festividades, una cristiana y una celta: la cristiana del Día de Todos los Santos celebrada el 1 de noviembre. Y la de origen celta llamada Samhain, una fiesta pagana que era como el Año Nuevo Celta porque servía como celebración del final de las cosechas y final del periodo estival.
Realmente el origen verdadero fue el Samhain celta, que pasó a los irlandeses. Y fueron los irlandeses los encargados de importarla a EEUU durante la Gran Hambruna irlandesa en 1.840.
Halloween es una derivación de la expresión inglesa «All Hallow’s Eve», y que significa «Víspera de Todos los Santos».
Halloween se celebra sobre todo en países anglosajones, como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá o Irlanda. Aunque últimamente la fiesta se ha universalizado y se celebra en muchos países con poca tradición, como en España o en países de América Latina.
Las calabazas, los colores naranja y negro, los gorros de brujas y trajes de fantasmas o esqueletos son la simbología más popular de Halloween.
Realmente el origen verdadero fue el Samhain celta, que pasó a los irlandeses. Y fueron los irlandeses los encargados de importarla a EEUU durante la Gran Hambruna irlandesa en 1.840.
Aunque no fue hasta más tarde cuando se celebraría masivamente. El primer gran desfile con motivo de Halloween se celebró en Minnesota en 1921. Le siguieron otros estados y a partir de entonces la fiesta se expandió por todo el territorio estadounidense y países anglosajones.
En Occidente, la tradición se transformó con un sentido religioso, homenajeando a los familiares difuntos el 1 de noviembre, como el Día de Todos los Santos.