Nueva York: El indiscutido poder del liderazgo político dominicano está marcando su territorio en el estado de Nueva York. 57 precandidatos dominicanos, aproximadamente el (12.3%) de la cuota del partido demócrata, mide su suerte este martes 22 de junio en las primarias de esa organización en el estado.
El Partido demócrata escoge este martes sus candidatos a cargos municipales, distritales y congresuales. Fernando Mateo, del Partido Republicano, es el único dominicano que aspira a la alcaldía, pero no cuenta con el respaldo de sus compatriotas, quienes abiertamente se han manifestado en favor del afroamericano Eric Adams.
Desde el alcalde, hasta contralores, presidentes de distrito y concejales, la comunidad dominicana tiene una larga lista de candidatos a elegir, principalmente por el Partido Demócrata, el más predominante de la ciudad.
Los criollos con más posibilidades de ganar esta contienda electoral están ubicados estratégicamente en los sectores donde vive la mayor cantidad de latinos, como es el caso del distrito 14 de El Bronx, donde los seis candidatos demócratas son dominicanos. En esta zona, los sondeos perfilan el triunfo entre Pierina Sánchez y Fernando Aquino.
Igualmente, en el distrito 10 que abarca zonas del Alto Manhattan, cuya posición ocupó Ydanis Rodríguez por 11 años, dos dominicanas, Carmen de la Rosa, y Ángela Fernández, avanzan en la carrera por ganar las elecciones.
Lo mismo ocurre en el distrito 7, ubicado entre las zonas de Harlem y la parte baja de Manhattan, donde se espera, según las últimas encuestas, que el dominicano Shaun Abreu se lleve la victoria.
En el caso de la alcaldía, posición ocupada por Bill de Blasio, se espera que, en las primarias demócratas, el afroamericano Eric Adams, quien ha asegurado su firme apoyo a la comunidad dominicana, gane los comicios de este martes.
Según los datos del último censo, más de 300 mil dominicanos están hábiles para votar en Nueva York, una cifra que podría duplicarse para las elecciones generales de noviembre, de ser aprobado un proyecto de ley que permitiría a los inmigrantes con residencia legal ejercer el voto, derecho que hasta ahora solo es otorgado a los ciudadanos americanos.