¿Habrá sillas blancas en la asamblea del PRM?
El Partido Revolucionario Moderno (PRM) demostrará mañana si realmente está fortalecido tal como sus dirigentes han vociferado por las cuatro esquinas.
Y es que la convocatoria de este domingo a la Convención Nacional Extraordinaria de Reforma Estatutaria, que aparentemente busca ratificar a las actuales autoridades sin el voto directo, secreto y universal de sus dirigentes; chocará de frente con varios sectores que no han disimulado su disgusto al respecto.
Uno de ellos es Guido Gómez Mazara, quien no esconde sus deseos de aspirar a la presidencia del partido, así como varios dirigentes que aspiran a cargos directivos y que han sometido en diversas ocasiones en las últimas semanas un recurso de amparo para anular la asamblea ante el Tribunal Superior Electoral (TSE), los cuales han sido declarados inadmisibles.
Mazara ha reiterado que: “la sentencia 019-2014 del TSE señala que los partidos políticos no pueden violentar el derecho a los militantes de elegir a sus autoridades mediante el voto secreto, directo y universal”. Según publicó la tarde del sábado el periódico dominicano El Caribe.
Este ambiente tenso de dimes y diretes trae recuerdos de aquel enero de 2013, justamente nueve años después, cuando hubo un enfrentamiento violento entre facciones del otrora Partido Revolucionario Dominicano (PRD) que dejó al menos ocho heridos.
Los videos y grabaciones de dirigentes lanzándose sillas y partiéndolas en el local del partido corrieron como pólvora por las redes sociales, dejando atónito al país e incluso más allá de las fronteras y los mares.
Muchos podrían decir que tal situación no puede ocurrir en el PRM porque supuestamente este no es el mismo partido de antes. O mejor, no puede repetirse en el PRM porque simplemente este no es el PRD de Miguel Vargas Maldonado.
Sin embargo, la práctica de ratificar autoridades sin acudir al voto directo de sus dirigentes también es del pasado, y ya que, según las quejas de los propios partidarios, suenan trompetas de repetir esos mismos vicios que se creían superados en una entidad moderna; ¿quién garantiza que no ocurra otra trifulca con las mismas características?
El presidente Luis Abinader tenía dos viajes pautados este sábado; uno para La Vega y el otro para Santiago. Pero de manera sorpresiva nos enteramos por el portavoz del Gobierno, Homero Figueroa, que el mandatario trabajará sus quehaceres de manera “remota”; o sea, desde su oficina en el Palacio Nacional.
Esto se debe a que el Gobierno está preparando un discurso para mañana, justamente el día en que se realizará la asamblea del partido. ¿Coincidencia o a propósito?
¿A caso el mandatario sabe que hay problemas internos o inconformidades con la base del partido debido a las promesas incumplidas de empleos del actual presidente del PRM, José Ignacio Paliza, quien también funge como ministro Administrativo de la Presidencia?
Se especula mucho que el discurso de Abinader va dirigido al tema del fideicomiso de Punta Catalina o al subsidio del combustible. No obstante, causa suspicacia que ya habiendo una agenda planificada en los pueblos del interior, el mandatario la varíe en víspera de la Convención y la fije el mismo día de la celebración.
Podemos analizar y deducir pero solo nos queda esperar este domingo, donde un PRM en el Gobierno estará en su primera prueba de fuego bajo el manto del fantasma de la reelección, la ratificación de las actuales autoridades a los mismos cargos en la asamblea y unos dirigentes como Gómez Mazara y el expresidente del Senado, Ramón Albuquerque, que no dudan en lanzar fuego a sus compañeros gobernantes.