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Rusia sufre pérdidas en fallido cruce de río, dicen funcionarios

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KIEV, Ucrania (AP) — Las fuerzas rusas sufrieron grandes pérdidas en un ataque ucraniano que destruyó un puente de pontones que estaban usando para tratar de cruzar un río en el este, dijeron funcionarios ucranianos y británicos en otra señal de la lucha de Moscú para salvar una guerra que terminó torcida.

Mientras tanto, las autoridades ucranianas abrieron el viernes el primer juicio por crímenes de guerra del conflicto. El acusado, un soldado ruso capturado, está acusado de matar a tiros a un civil de 62 años en los primeros días de la guerra.

El juicio comenzó cuando la ofensiva de Rusia en Donbas, el corazón industrial del este de Ucrania, parecía convertirse cada vez más en una guerra de desgaste.

El comando aerotransportado de Ucrania publicó fotos y videos de lo que dijo que era un puente de pontones ruso dañado sobre el río Siversky Donets y varios vehículos militares rusos destruidos o dañados en las cercanías. El comando dijo que sus tropas “ahogaron a los ocupantes rusos”.

El Ministerio de Defensa de Gran Bretaña dijo que Rusia perdió «elementos de maniobra blindados significativos» de al menos un grupo táctico de batallón en el ataque a principios de esta semana. Un grupo táctico de batallón ruso consta de unos 1.000 soldados.

“Llevar a cabo cruces de ríos en un entorno disputado es una maniobra muy arriesgada y habla de la presión a la que están sometidos los comandantes rusos para avanzar en sus operaciones en el este de Ucrania”, dijo el ministerio en su actualización diaria de inteligencia.

En otros desarrollos, se cuestionó un movimiento de Finlandia y, potencialmente, Suecia para unirse a la OTAN cuando el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que su país «no tiene una opinión favorable» hacia la idea. Acusó a Suecia y otros países escandinavos de apoyar a militantes kurdos y otros que Turquía considera terroristas.

Erdogan no dijo abiertamente que impediría que las dos naciones se unieran a la OTAN. Pero la alianza militar toma sus decisiones por consenso, lo que significa que cada uno de sus 30 países miembros tiene derecho a veto sobre quién puede unirse.

Una expansión de la OTAN sería un duro golpe para el presidente ruso, Vladimir Putin, quien emprendió la guerra en lo que dijo fue un intento de frustrar el avance de la alianza hacia el este. Pero tras la invasión de Ucrania, otros países a lo largo del flanco de Rusia temen ser los siguientes.

Con Ucrania pidiendo más armas para defenderse de la invasión, el jefe de asuntos exteriores de la Unión Europea anunció planes para dar a Kiev 500 millones de euros adicionales (520 millones de dólares) para comprar armas pesadas.

El ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Reznikov, dio la bienvenida a las armas pesadas que se abrieron paso hacia el frente, pero admitió que no se vislumbra un final rápido de la guerra.

“Estamos entrando en una nueva fase a largo plazo de la guerra”, escribió en una publicación de Facebook. “Nos esperan semanas extremadamente difíciles. ¿Cuántos habrá? Nadie puede decirlo con seguridad”.

La batalla por el Donbás se ha convertido en una lucha de ida y vuelta de pueblo por pueblo sin grandes avances en ninguno de los bandos y poco terreno ganado. En su discurso nocturno del viernes, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy dijo que nadie puede predecir cuánto durará la guerra, pero que las fuerzas de su país han estado progresando, incluida la recuperación de seis pueblos o aldeas ucranianos el día anterior.

Se han producido feroces combates en el río Siversky Donets, cerca de la ciudad de Severodonetsk, dijo Oleh Zhdanov, analista militar ucraniano independiente. El ejército ucraniano lanzó contraataques pero no logró detener el avance de Rusia, dijo.

“Se está decidiendo el destino de una gran parte del ejército ucraniano: hay unos 40.000 soldados ucranianos”, dijo.

El jefe militar ucraniano de la región de Luhansk del Donbas dijo el viernes que las fuerzas rusas abrieron fuego 31 veces en áreas residenciales el día anterior, destruyendo docenas de casas, especialmente en las aldeas de Hirske y Popasnianska, y un puente en Rubizhne.

En el sur, los funcionarios ucranianos reclamaron otro éxito en el Mar Negro, diciendo que sus fuerzas derribaron un barco logístico ruso que intentaba entregar un sistema antiaéreo. Aunque no hubo confirmación de Rusia, y no se reportaron víctimas.

En las ruinas del puerto sureño de Mariupol, los combatientes ucranianos escondidos en una planta siderúrgica enfrentaron continuos ataques rusos contra el último bastión de la resistencia en la ciudad. Sviatoslav Palamar, subcomandante del Regimiento Azov de Ucrania, dijo que sus tropas resistirán «tanto como puedan» a pesar de la escasez de municiones, alimentos, agua y medicinas.

Justin Crump, un excomandante de tanques británico que ahora es consultor de seguridad, dijo que las pérdidas de Moscú lo han obligado a reducir sus objetivos en Ucrania. Dijo que los rusos han tenido que usar unidades ensambladas apresuradamente que no se han entrenado juntas.

“Esto no va a ser rápido. Así que estamos preparados para un verano de lucha al menos. Creo que la parte rusa tiene muy claro que esto llevará mucho tiempo”, dijo.

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