¡No se sabe qué creer!
Por Alexander Olivence
Santo Domingo, RD: Nuestro bello país en verdad está en el mismo trayecto del sol, es un país bendecido en todos los aspectos, cultural, artístico, social, agrícola, climático, entre otros. ¡En lo que no ha tenido suerte es en administración estatal!, pues justo ahora que nos vemos con uno de los presidentes más transparentes que ha pasado por América Latina, con una imagen y trabajo sin rechazo, nos vemos desprovistos de líderes y administradores que sirvan de backstage y colchón, de plataforma para el trabajo de gobierno.
Socialmente muchos directores y ministros están muy mal posicionados actualmente y sin embargo, no los cambian o destituyen de su posición! Dejándonos la incógnita de qué tan grande es la falta de elegibilidad para ocupar posiciones de envergadura y porque a unos cuantos los sobrecargan con dos y hasta tres decretos a la vez…
Pero esta no es la única situación, también tenemos los que en uso de sus funciones han creado compromisos laborales con personalidades del pasado gobierno dejando a los miembros del PRM en la inopia total, y no hablemos de los casos aislados en los que dirigentes de alta envergadura han sido cancelados para simplemente cederles esa plaza a un dirigente del PLD, repito, no a un miembro o simpatizante, sino a un DIRIGENTE ( como el caso de Rafael Rojas en Medio Ambiente); honestamente, nuestro presidente está trabajando prácticamente solo, por lo que no es extraño verle un semblante cansado en imágenes de una que otra actividad.
Ya está bueno de la demagogia farandulera a la que se han dedicado unos cuantos, se les ve constantemente en firmas de acuerdos y convenios y todo queda ahí, como dicen en el campo ¡Na se da! Llenan las nóminas de amigos y/o compromisos emocionales, dejen de hacerle daño a las bases del partido y si no pueden administrar… déjenle el espacio a quien tenga el deseo de trabajar! Porque de verdad, ya ¡no se sabe en qué creer!
