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Hijos nietos y sobrinos destacan trayectoria y entrega de Corporán de los Santos por los más pobres

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NUEVA YORK._ Los hijos, nietos y sobrinos del comunicador Rafael Corporán de los Santos, que estuvieron el lunes en la ceremonia de develizamiento del rótulo que lleva el nombre de “Rafael Corporán de los Santos Way”, en la avenida Broadway y la calle 176, en la parte trasera del teatro United Palace en el Alto Manhattan, destacaron su trayectoria y entrega por los más pobres de la República Dominicana.

El hijo mayor, Rafael Corporán Quezada (Corporancito), dijo que una de las cosas más importantes que recuerda de su padre, es su capacidad de trabajo, enfrentar los retos y ser exitoso haciéndolo, sin ser una persona que buscaba los logros para él mismo, sino para compartirlos.

“Esas fue una de las cosas que me enseñó mi padre, a compartir en cada momento los alcances, por eso, me siento muy orgulloso de ser su hijo y en cada sitio por donde camino, encuentro a alguien a quien él ayudó, le abrió una puerta o lo motivó e inspiró a trabajar y superarse”, agregó.

Dijo que hay muchos hoy en los medios de comunicación y se formaron profesionales, enfrentándose a la vida y triunfando”, señaló.

Relató que antes de salir el programa “Sábado de Corporán, que fue el primer espacio de televisión que se transmitió en el exterior, los artistas dominicanos tenían que venir a Nueva York para presentarse y darse a conocer, pero después, esos artistas tenían que ir al programa para sonar en Nueva York”, añadió.

“Ese fue también uno de los apoyos que él le dio a la cultura. Cuando teníamos las emisoras de radio, mantuvo una posición firme en contra de la payola y les daba respaldo a los artistas dominicanos creando espacios para que solo se difundiera la música de los dominicanos”, explicó.

Corporán Quezada, recordó también que trabajó con su padre, quien le decía que él fue el primer Corporán en comer compota.

“Lo decía, porque en su infancia, la familia no tenía recursos para darles compota a los hijos y cuando él fue electo alcalde, yo asumí la dirección de las empresa radiofónica, conocidas como Circuito Corporán”, dijo.

Dijo que antes de su muerte, Corporán decidió vender la empresa, porque era un hombre que le gustaba compartir. “Nosotros, la familia Corporán, somos humilde, y lo único que tenemos es su ejemplo de mucho trabajo, querer a la gente y ese cariño, nos lo dejó como parte de su herencia todavía, no vivió para almacenar, sino para dar y compartir”, agregó.

Elías Barrera Corporán, uno de los sobrinos y actual director de comunicaciones del consulado general en Nueva York, dijo que su tío, se entregó mucho a la gente y le enseñó que hay que venir al mundo a servirles a los demás.

“Siempre decía que hay que ser humilde, porque nunca se sabe cuándo se va a necesitar a los que están más abajo, y esa son la gente que ayudan a uno a salir adelante”, agregó Elías.

“Me enseñó a entregarme en todo lo que se hace y el apego a la unidad familiar, sin importar cuán humilde es el trabajo que se realiza”, dijo Barrera Corporán.

“Era un enamorado de Nueva York y muchos de los que estamos aquí, vivimos nuestra infancia viendo a Sábado de Corporán y fue el primer programa que difundió Cadena Azul internacionalmente”, añadió.

Recordó que la mayoría de los artistas con carreras exitosas se formaron y se proyectaron en Sábado de Corporán.

“Se esmeró y se preparó para ser siempre lo mejor y le dio todo a su pueblo”, dijo.

Junto al hijo mayor y el sobrino estuvieron su otro hijo, Rafael Corporán Caimares y los nietos Natalia Corporán Crespo y Rafael Miguel Corporán Crespo.

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