Entre lágrimas, empleada de banca de San Pedro de Macorís narra el terror que vivió durante asalto
“Tengo miedo, tengo pavor, yo no estoy bien”, decía mientras lloraba una de las empleadas de la Banca Gogo Sport, de San Pedro de Macorís, quien junto a sus compañeras de trabajo vivió momentos de terror, cuando al menos cinco hombres armados asaltaron el establecimiento.
El dramático suceso ocurrió la mañana del pasado lunes 10 de abril. Los delincuentes llegaron al lugar y a punta de pistolas y cuchillos, atacaron a los dos agentes de seguridad y los despojaron de sus armas de reglamento.
Solo han pasado dos días del suceso, por lo que la joven tiene las emociones a flor de piel. Sin embargo, por un momento contuvo las lágrimas y prosiguió narrando lo ocurrido. “Los delincuentes entraron corriendo para acá y cuando yo quise reaccionar para cerrar la puerta, no me dio tiempo, ya los tenía ahí mismo”, explicó a Diario Libre la víctima, que pidió la reserva de su nombre.
Agrega: “Me tiraron al suelo, agarrada del cuello, a la otra muchacha también, a la otra que estaba afuera la trancaron en el baño y a los seguridad los tenían en el suelo, le dieron a uno en la cabeza”, recreó sin poder especificar la cantidad de hombres que entraron al lugar. En el video de las cámaras de seguridad al que este diario tuvo acceso se pudo ver a cinco de ellos.
La joven volvió a llorar cuando contó que cerró los ojos por temor a que le quitaran la vida porque, con una pistola en el pecho, la amenazaron que si miraba a los asaltantes la iban a matar: “Yo cerré los ojos y decía no voy a mirar, no veo nada”.
Los nervios se apoderaron de ella y cuando uno de los asaltantes les ordenó que se pararan del piso, ella no tenía movilidad. “No sentía las rodillas, yo no sentía nada, no podía pararme, la muchacha que estaba conmigo intentó halarme, pero ella no podía y uno de los delincuentes fue que me paró, mientras yo seguía con los ojos cerrados”.
Ya de pies, las damas, fueron conducidas al baño, donde las encerraron.
Una vez se marcharon los asaltantes, los empleados llamaron a la Policía, y de inmediato una patrulla se presentó al lugar, los condujeron al destacamento para ser interrogados y luego despachados.
Laboran con normalidad
Pese a todo este drama del que aún no se recupera, la dama y sus demás compañeros han tenido que acudir a sus puestos de trabajo para laborar de manera normal.
“Hemos estado trabajando normal. Pero yo necesito ayuda sicológica”, dijo con la voz entrecortada.
Tras el hecho, los propietarios de la banca prometieron a los empleados reforzar la seguridad del lugar.
Cargaron con más de un millón de pesos
Los desaprensivos llenaron dos mochilas de dinero y unas cajitas de metal que había en la banca. Se estima que se llevaron más de un millón pesos, producto de la venta de varios días. TT
