La policía revela que el supremacista australiano cometió la masacre contra las dos mezquitas en 36 minutos
El principal detenido por el atentado contra dos mezquitas de Christchurch, el ciudadano australiano Brenton Tarrant, ha comparecido este sábado ante un juzgado de esta ciudad neozelandesa acusado de asesinato. Tarrant, que ha sonreído a la prensa con una mueca de suficiencia cuando dos oficiales de la policía le han acompañado hasta el banquillo, fue quien perpetró los ataques contra los dos templos, según ha revelado la policía. Las grabaciones de las fuerzas de seguridad demuestran que se desplazó de una mezquita a otra —están a pocos minutos de distancia en coche— en un episodio de terror que duró 36 minutos. Los agentes lo detuvieron justo cuando entraba otra vez en el automóvil, donde tenía dos bombas con las que planeaba continuar la masacre. Los datos oficiales cifran en 49 las víctimas mortales y 39 heridos que siguen hospitalizados, 11 de ellos en cuidados intensivos.
El juez ha ordenado este sábado a los medios de comunicación que no publiquen fotografías de la cara de Tarrant para garantizar su derecho a un juicio justo. Seguirá en prisión preventiva sin fianza hasta el 5 de abril. Los agentes han hecho un registro exhaustivo de la vivienda de Tarrant en Dunedin, en la isla sur de Nueva Zelanda, donde vivía desde finales de 2017. El detenido, que había trabajado de entrenador personal, era miembro de un club de tiro donde acudía a menudo. Según sus vecinos, era un hombre tranquilo y discreto a quien le gustaba hablar de sus viajes.