Hallan muerto en río del Este estudiante dominicano que se habría suicidado por reprobar materia
NUEVA YORK._ Dos semanas después de morir, el desamparado afroamericano Robert Townes, fue hallado muerto en su habitación en un refugio situado en el edificio 555 de la calle 174, entre avenidas Audubon y Sant Nicholas en el Alto Manhattan.
Los otros desamparados, que ocupan 50 habitaciones, financiadas por la ciudad y que le son rentadas al propietario del edificio, no se dieron cuenta de que Townes, estaba muerto.
El desamparado, murió el mes pasado y cuando finalmente se descubrió el cadáver, estaba en avanzado estado de descomposición, según el médico forense debido al hallazgo tardío.
La madre de Townes, que se enteró de la muerte de su hijo en una publicación de facebook, le dijo al canal 7 de la cadena ABC que su hijo no merecía morir así.
Las instalaciones de 50 habitaciones están a cargo de la empresa Core Services Group contratara por los Servicios de Reubicación de Emergencias de Preservación y Desarrollo de Viviendas de la ciudad.
El presidente de Core, Jack Brown, le dijo al canal que Townes fue visto por última vez cinco días antes de su muerte y que su muerte puede haber pasado desapercibida porque la instalación tiene más privacidad que un refugio para personas sin hogar, por lo que no había necesidad de entrar a su habitación.
Pero la hermana de Townes, Idel Patterson, dice que eso es solo una excusa para justificar la falta de cuidado y supervisión adecuada de las instalaciones controladas por el toque de queda.
«Estoy furiosa por el simple hecho de cómo no puedes oler un cuerpo», dijo la hermana. «Es simplemente horrible, nadie debería ser encontrado así».
El cuerpo de Townes estaba tan descompuesto que el médico forense solo podía identificarlo a través de las huellas dactilares.
El Departamento de Preservación y Desarrollo de la Vivienda de la ciudad declinó hacer comentarios.