¿Quién es Robin Westman, el tirador Minneapolis
Minneapolis, Minnesota: Un nuevo tiroteo escolar sacudió a Estados Unidos, esta vez en la ciudad de Minneapolis, donde un exalumno de la Escuela Católica Annunciation, identificado como Robin Westman, abrió fuego contra estudiantes y feligreses durante la misa matutina. El ataque dejó un saldo trágico de dos menores muertos, de ocho y diez años, y 17 heridos, entre ellos 14 niños.
Robin Westman, de 23 años, nació como Robert Westman y en 2020 un tribunal de distrito de Minnesota aprobó el cambio de nombre, tras alegar que se identificaba como mujer. Las autoridades confirmaron que no tenía antecedentes penales conocidos y que actuó en solitario.
El director del FBI, Kash Patel, aseguró que el caso será tratado como terrorismo interno y crimen de odio contra católicos.
El hecho ocurrió alrededor de las 8:30 de la mañana, cuando Westman se aproximó al lateral del edificio y disparó a través de las ventanas de la iglesia, donde los alumnos participaban en la misa diaria.
El jefe de policía de Minneapolis, Brian O’Hara, detalló que Westman portaba un rifle de alto poder, una escopeta y una pistola de nueve milímetros, armas que habían sido compradas legalmente en fechas recientes. Tras abrir fuego, se quitó la vida de un disparo.
“Fue un acto deliberado de violencia, absolutamente incomprensible. Un acto cobarde”, declaró O’Hara.
El arsenal incluía inscripciones que han despertado polémica. En el rifle podía leerse la palabra “Mashallah”, lo que desató especulaciones sobre una posible influencia islamista. Sin embargo, también había mensajes contradictorios como “Maten a Trump”, frases antisemitas, consignas contra católicos y musulmanes, y la frase: “¿Dónde está ahora tu jodido Dios?”. En otro cargador se leía: “Para los niños”.
Previo al ataque, Westman publicó videos en YouTube en los que mostraba sus armas, cargadores y cuadernos con garabatos, dibujos de armas y frases violentas. Los videos fueron retirados tras solicitud de la policía.
En escritos personales, Westman afirmó que llevaba cinco años planeando el ataque, que estaba deprimido y que sufría cáncer de pulmón por el uso de vapeadores.
“Solo quiero escapar de este mundo, de las facturas constantes, de los trabajos de mierda y de la injusticia de este país. Estoy harto”, escribió.
También dejó mensajes dirigidos a su familia
A sus hermanos: perdón por manchar para siempre el resto de sus vidas. Sus carreras, vidas, relaciones saltarán por los aires”.
A sus padres: “Por favor no piensen que fracasaron como padres”. La agencia AP informó que Westman era sobrino de Bob Helenringer, excongresista republicano por Kentucky, quien expresó: “Deseo que me hubiera matado a mí en lugar de a esos niños inocentes”.
Las autoridades investigan las notas, los cuadernos y las cuentas en redes sociales vinculadas al atacante, para determinar sus motivaciones exactas. El FBI reiteró que se trata de un acto de terrorismo doméstico, con elementos de odio religioso.
Mientras tanto, Minneapolis llora a las víctimas y el país vuelve a enfrentar el dilema de cómo frenar la violencia armada en las escuelas. El tiroteo se suma a la larga lista de masacres escolares que marcan la historia reciente de Estados Unidos.
