Haitianas acusadas de practicar vudú con niños a los que quemaron son absueltas de cargos en corte de Massachusetts
NUEVA YORK._ Dos hermanas haitianas, Peggy Labossiere, de 53 años, y Rachel Hilaire, de 42, acusadas de cargos criminales por practicar vudú con dos niños, una hembra a la que quemaron y amenazaron con cortarle la cabeza usando un largo cuchillo en la ciudad de East Bridgewater, fueron absueltas ayer miércoles, después que los fiscales retiraron los cargos porque algunos testigos se negaron a testificar, supuestamente temerosos de ser víctimas de la brujería de las imputadas.
El Ministerio Público dijo que estaba preparado para llevar a juicio a las haitianas, pero no hallaron testigos que pudieran señalarlas ante el jurado, por lo que decidió desestimar las acusaciones contra ambas hermanas, aunque el fiscal del distrito de Playmouth, Timothy Cruz, advirtió que en caso que aparezcan nuevas evidencias, podría retomar el caso.
Las dos haitianas, también enfrentaban cargos por de asalto y agresión a niños, caos y asalto y agresión con un arma peligrosa, entre otros cargos.
Fueron arrestadas y acusadas en enero 2018.
«En ausencia del testimonio de las víctimas, se determinó que no podíamos cumplir con presentar los cargos y las pruebas más allá de una duda razonable», dijo en un comunicado Beth Stone, portavoz del fiscal Cruz.
Las autoridades rescataron a los dos niños en un apartamento en East Bridgewater después de que habían faltado a la escuela y las familias contactaron a la policía con inquietudes sobre su bienestar, según la oficina del fiscal.
Los investigadores dijeron que Hilaire y Labossiere supuestamente ataron a la niña con cintas elásticas, le quemaron la cara con un líquido no identificado y le rascaron la piel con una aguja hasta que sangrara.
La fiscalía también alegó que la niña le dijo a la policía que Labossiere la tocó inapropiadamente y la amenazó con cortarle la cabeza con un cuchillo grande.
Los fiscales dijeron en una audiencia de peligrosidad en febrero de 2018 que el abuso era parte de un presunto ritual vudú.
El juicio contra las dos hermanas estaba programado para comenzar el lunes de esta semana, pero los fiscales presentaron una notificación conocida como “nolle prosequi” (no persecución) por todos los cargos cuatro días antes de que comenzara el proceso, por lo no continuarían con el caso.
«Sin embargo, a medida que se acercaba la fecha del juicio, se hizo evidente que estas dos víctimas infantiles no podrían testificar o estarían limitadas sustancialmente en su capacidad de testificar», dijo Stone. «Consideramos cuidadosamente la mejor manera de proteger a estos niños de un mayor trauma para que puedan seguir adelante con sus vidas», señaló.
Stone agregó que los fiscales conservan la capacidad de volver a presentar cargos si se encuentran nuevas pruebas o las circunstancias cambian.
El abogado William Barabino, de defensa criminal con 17 años de experiencia, le dijo al periódico Boston Herald que cuando los fiscales presentan un “nolle prosequi”, a menudo se espera que los cargos no se vuelvan a presentar.
«Sería una rara circunstancia si los fiscales vuelven a presentar el caso, porque entonces tendrían que comenzar el proceso desde el principio», dijo Barabino.
El abogado agregó que en ausencia de testimonios de testigos claves, los fiscales en casos similares, a veces pueden confiar en declaraciones grabadas con contrainterrogatorios o en el testimonio de terceros.
Pero, debido a la gravedad de las acusaciones, Barabino dijo que espera que esas opciones no estén disponibles para la fiscalía.
“Es muy raro que un fiscal de distrito no ponga a alguien en el estrado de los testigos simplemente por algún tipo de trauma anticipado. Deben haber determinado que estos niños eran particularmente frágiles”, explicó el abogado.
«Solo puedo suponer que hicieron todo lo posible para proceder con el caso», añadió el criminalista.