Francisco Reynoso ve injusticia en “escogencia” diputados de Ultramar del PLD
Por Francisco Reynoso
Camden, NJ: Wow! Cuanta injusticia y desconsideración para dos dirigentes de mucha valía y una trayectoria de muchos años en el que hacer político en la ciudad de New York y New Jersey.
Los reconocidos dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Juan Aquino y Francisco Fernández, quienes han ofrendado hasta sus vidas a su institución política, profesándole lealtad incondicional. Hoy han quedado más confundidos que adoloridos por una “puñalada trapera” que han recibido del amo al que han adorado.
Es penoso que dirigentes como ellos, ambos miembros del Comité Central (CC) de su organización, fueron excluidos como candidatos a diputados de Ultramar, sin dar explicación, almenos en público, pero se cree que hace mucho tiempo que arriba se sabía que estaban excluidos.
Francisco Reynoso, exmiembro del PLD, ahora dirigente de La Fuerza del Pueblo (FP)
Juan Aquino y Francisco Fernández, fueron sacrificados y llevados como toros al matadero. Primero se los dejó que se desgastaran corriendo a todo lo largo y ancho de la Circunscripción 1, que abarca un extenso territorio, desde Carolina del Sur, hasta Boston y Canadá, recorrido que debieron hacer durante más de un año, mientras el Dr. Yomare Polanco asistía a un festín de una lotería, sabiendo los números que iban a salir.
El PLD dejó que ambos se desangraran en una larga campaña interna que debió costar cerca de 200 mil dólares a cada uno. Pues me consta que almeno Aquino, había conformado un equipo de campaña en cada uno de los 15 estados, porque estaba preparado para una contienda interna que en democracia partidaria, era muy difícil que perdiera.
«La primera “puñalada trapera” se la propinó el grupo que hoy se quedó con el PLD, después de la división, cuando sin consultar a las bases se reservó las candidaturas, negándole a la militancia de esa organización política el derecho de elegir y ser elegidos».
Con este acto antidemocrático ya se había tendido el manto de la traición, y aún así, sabiendo a quienes Medina señalaría con el dedo, desde palacio se jugaba con las mentes de ambos dirigentes y los demás precandidatos, dándoles a entender a todos, por separado, que serían escogidos en la posición #1. Pero, eso sí, según mis fuentes, sin prometérselo a ninguno. Así, todos continuarían trabajando e invirtiendo de sus propios recursos en la promoción de ellos y en la del “Penco”, que no ha podido arrancar ni en RD, Europa ni mucho menos en EEUU., donde el PLD ha perdido todas las últimas campañas electorales.
Dentro del peledeísmo, la noticia de la escogencia al dedo del Dr. Yomare Polanco cayó como un balde de agua fría. Se dice que se mantienen en silencio por la férrea disciplina partidaria que a su conveniencia ha impuesto el Comité Político a lo interno de la organización, pero a lo interno hay insurrección y rebelión de muchos cuadros tradicionales, que no conciben trabajar en lo adelante con un hombre que viene de fuera y escogido con el dedo.
Es penoso, sin embargo, que los largos años de sacrificios partidarios de Juan Aquino y Francisco Fernández, hayan sido tirados al zafacón de la historia en un solo día por la decisión de un reducido grupo o de un hombre, que asaltó al PLD y nos dejó a todos en los acantilados…mirando desde las gradas, robándonos hasta el derecho de elegir.
Como ex peledeísta, considero muy lamentable que esta funesta decisión, primero, de privar a los peledeístas del derecho de elegir y ser elegidos, garantizado en los estatutos del PLD y la constitución de la República, y segundo, que un dedazo haya terminado con dos brillantes carreras políticas de dos valiosos hombres, que de antemano, sé que no dirán nada y sufrirán en silencio el amargo dolor que deja una “puñalada trapera”.
Lo que palacio y su séquito no saben es que el silencio de Juan Aquino y Francisco Fernández, es el eco de un dolor generalizado de las bases del PLD, que por más de 20 años han visto todas las direcciones de sus organismos secuestradas por la concupiscencia de un grupo que solo se va quedando con las siglas de lo que fue el partido que Juan Bosch me dejó a mí, a mis compañeros, al pueblo dominicano, sepultando y llevándose entre sus garras el más completo proyecto político de un pueblo.
