El doctor Lantigua afirma que jóvenes contagiaron viejos y critica fallo de políticos que permitió propagación de COVID -19 en Nueva York

NUEVA YORK._ El doctor Rafael Lantigua, vicedecano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Columbia y director de servicios a pacientes externos en el hospital Presbiteriano en el Alto Manhattan, uno de los galenos que encabeza la cruzada científica contra el COVID-19, dijo anoche que los jóvenes contagiaron a los viejos en sus viviendas, porque debido a la densidad poblacional y el  hacinamiento, los primeros eran despachados de las emergencias con síntomas visibles del coronavirus y cuando llegaban a sus casas, transmitieron la pandemia a los adultos mayores con  los que convivían.

Afirmó que la incertidumbre en la comunidad hispana se mantiene, a pesar de que los se han calificado como algunos retrocesos en la curva del COVID-19.

Lantigua, considerado el galeno dominicano en el exterior de más alto perfil en su especialidad, criticó a los líderes políticos locales, diciendo que estos se durmieron en preparar las respuestas rápidas y adecuadas, lo que fue un factor principal que permitió la propagación del COVID-19 en Nueva York.

Entrevistado anoche, en el programa “Entre Líderes” que realiza el periodista José Alduey Sierra, Lantigua explicó que el liderazgo no tomó en cuenta el hacinamiento que se verifica en los barrios marginados de inmigrantes, donde en la mayoría de apartamentos, viven hasta ocho personas en una habitación, lo que provocó el contagio de jóvenes a mayores adultos.

“Creemos que la gran mayoría de los casos, están en las casas, razón por la cual hay menos pacientes yendo a las emergencias de los hospitales”, dijo Lantigua.

Dijo que los factores determinantes a nivel social y económico, se conocen en la medicina, entre los que están también la marginalidad, el hacinamiento por la densidad poblacional.

“Sabíamos que esos factores iban a causar problemas, porque los más jóvenes iban a la emergencia con síntomas de la enfermedad, se les hacía mucho hacer los análisis y los enviaban a los apartamentos, donde en muchos, hay hasta ocho personas en un cuarto”, agregó.

“¿Qué pasó?, llegaban a sus casas y contagiaron a los adultos mayores con problemas de diabetes, renales y arteriales, tenían que ser llevados a la emergencia, cinco días más tarde y a morir, lo que para mí fue una de las grandes causas”, precisó Lantigua.

Señaló que en Nueva York se pensó y se habló de  60 mil ventiladores, de 140 mil camas, pero de lo que los políticos no tuvieron visión fue de la densidad poblacional de Nueva York.

“Esas personas jóvenes que llegaban con esos problemas, había que aislarlos en sus apartamentos, con la finalidad de que no contagiaran a los envejecientes, ahí fallamos y yo digo que fue una falla del liderazgo político de la ciudad de Nueva York”, afirmó.

“Las personas también están  comprendiendo que a menos que no tengan síntomas serios, no deben ir a la emergencia y deben quedarse en sus casas. Los que están acudiendo a la emergencia son aquellos con dificultades respiratorias y por eso, aumenta el número de pacientes en los ventiladores”, explicó.

“Este enfermedad se manifiesta en diferentes formas y ataca prácticamente a todos los órganos, si es verdad que la fiebre, los problemas respiratorios, la tos, los dolores de garganta y la congestión nasal están entre los más frecuentes, también nosotros hemos visto personas que sin  fiebre, solamente con malestares en el cuerpo, falta de apetito y olfato, dolores de cabeza, vómito y diarrea, están afectados por el virus”, señaló.

“Hay pacientes que tienen convulsiones con los primeros síntomas, envejecientes que la familia lo nota, porque pierden la noción, se desorientan y cuando quieren levantarse, se caen, es una enfermedad con muchas facetas”, dijo el galeno.

“Sin embargo, sigue siendo clasificada como una enfermedad respiratoria, o sea, que aquellos pacientes que causan más problemas son los que tienen dificultad para respirar, que habla con voz entrecortada, porque no puede respirar y se sienten la respiración corta, cuando se les mide la tienen entre 25 y 30”, añadió.

“Lo normal es que el oxigeno en la sangre esté entre 93 y 95,  pero cuando se está sentado y cae a 92, es una situación  que pone en alerta el paciente. Y cuando se camina y el oxigeno está por debajo de 85, también es preocupante”, agregó Lantigua.

Preguntado sobre el estado de salud del reportero de Telemicro Internacional, Manuel Ruiz, informó que estaba en estado crítico después de complicarse, pero sigue en recuperación con capacidad en las fosas nasales y la secreción se mantiene.

“Con Dios por delante, lo tendremos de vuelta en el seno de su comunidad”, añadió.

También se refirió a las investigaciones que se hacen para encontrar tratamientos exitosos, pero aseguró que hasta ahora, no hay ninguno.

LLAMA A NO ESPECULAR CON NÚMEROS

Lantigua, también llamó a los medios a no especular con los números sobre la cantidad de contagiados, graves y muertos en la comunidad dominicana.

“Se está especulando debido al porcentaje de habitantes que representan los latinos y afroamericanos en la ciudad, pero estamos sugiriendo que el Departamento de Salud, ofrezca una escala por nacionalidades para poder tener un escenario estadístico adecuado”, añadió.

Aclaró que no se puede aventurar diciendo que miles de dominicanos, hispanos y afroamericanos están contagiados, en cuidados intensivos o muertos, porque hasta ahora, nadie lo sabe con exactitud.

“Es muy difícil, porque si vemos las áreas demográficas de las zonas postales (Zip Codes), vemos que es donde hay mayor cantidad de latinos y afroamericanos, pero hasta ahora no hay datos, aunque muchos creen que la mayoría de los fallecimientos han ocurrido en esas áreas”, explicó.

Dijo que los porcentajes dados por el Departamento de Salud en los mapas que se publicaron la semana pasada, son datos muy preliminares.

“Ponerse a extrapolar números es muy prematuro”, añadió.

Recordó su pedido a la ciudad de que como ya hay más de 6 mil actas de defunción firmadas, se pueden ofrecer datos por nacionalidades.

“En los certificados de defunción se establece la nacionalidad de cada individuo y como la mayoría de muertos en Nueva York son  de más de 40 años, se presuponme que nacieron fuera de los Estados Unidos, pero también hemos pedido los datos de los afroamericanos”, añadió Lantigua.

“Es importante dilucidar esos datos como lo es en el futuro el establecer a cuáles hospitales fueron, para también establecer la capacidad de absorción de los hospitales y porque fueron incapaces de suministrarles los medicamentos adecuados para detener el virus, lo que se hará en un estudio de investigación  más adelante”, informó.