Evangélicos RD denuncian deterioro de la calidad de vida, debido a carestía
SANTO DOMINGO.- El alza en los precios de los alimentos, los medicamentos y materiales de construcción han generado un gran descontento en la población y agudizado significativamente los niveles de deterioro de algunos sectores, a juicio del pastor Feliciano Lacen, presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue).
En ese sentido, consideró que «más que un estado de emergencia, el país necesita los programas sociales para que la clase más empobrecida pueda sostenerse de pie».
Dijo que el sendero que lleva la República Dominicana es de alta preocupación, ya que «cada vez más la clase pobre tiene menos oportunidades en los servicios públicos y privados».
Declaró que la pandemia del COVID-19 ha provocado un aumento sin precedente en los niveles de pobreza y ha impactado fuertemente en la desigualdad y el empleo, generando ansiedad y trauma psicológico, por lo que la economía dominicana requiere propuestas creativas para aligerar el peso de la crisis.
Para enfrentar esa crisis, propuso una cumbre con las iglesias, partidos políticos, ONG y todos los sectores vivos de la República Dominicana.
«Entendemos que es urgente reformar la ley de seguridad social, ya que la que existe actualmente solo beneficia a un determinado grupo. Asimismo, invitamos al pueblo dominicano a renovar su fe en Dios y a orar para que haya una redistribución justa de las riquezas y que Dios sea el centro de la vida de los dominicanos», concluyó.