Según el fiscal general de Nueva York no hay base para la demanda de Trump que desafía la investigación

NUEVA YORK (AP) — El fiscal general de Nueva York quiere detener el intento del expresidente Donald Trump de poner fin a una investigación civil de un año sobre sus prácticas comerciales y le pidió a un juez el miércoles que desestime su demanda destinada a detener la investigación.

La fiscal general Letitia James argumentó en documentos judiciales que la demanda de Trump, presentada el mes pasado en un tribunal federal en el norte del estado de Nueva York, es un «ataque colateral» repentino a su investigación, diseñado en parte para protegerlo de una citación reciente.

James, un demócrata, dijo que no había base legal para la demanda de Trump ni evidencia para respaldar la afirmación del republicano de que la investigación es puramente política. También dijo que un tribunal federal no tiene ningún papel en intervenir en una investigación que ha sido supervisada en parte por un juez de un tribunal estatal.

En una declaración en respuesta a la presentación judicial del miércoles, la abogada de Trump, Alina Habba, dijo: «Una vez más, Letitia James no aborda su conducta atroz y poco ética en su débil respuesta a nuestra queja».

Antes de la citación, Trump y su compañía, la Organización Trump, cumplieron con la investigación y nunca cuestionaron la base legal subyacente de la investigación o la autoridad legal de la oficina del fiscal general para llevarla a cabo, dijo James en los documentos judiciales.

James calificó las afirmaciones en la demanda de que su investigación no era legal o no estaba justificada como un «cambio de rumbo total», luego de que Trump accedió previamente a entregar sus declaraciones de impuestos sobre la renta de 2014-2019 a su oficina, mientras que su compañía proporcionó más de 900,000 documentos y testimonio de más de una docena de empleados actuales y anteriores.

Trump sostiene en la demanda que la investigación de James sobre los asuntos, incluida la valoración de los activos de su empresa, violó sus derechos constitucionales en un «esfuerzo apenas velado para difamar públicamente a Trump y sus asociados».

La demanda describe a James como un «desdén personal» por Trump, señalando numerosas declaraciones que ha hecho sobre él, incluida su jactancia de que su oficina demandó a su administración 76 veces y tuitea durante su campaña de 2018 que ella tenía sus «ojos en la Torre Trump» y que Trump «se estaba quedando sin tiempo».