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Administrador de hogar de ancianos dice quedó petrificado ante orden infame de Cuomo

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Nueva York: Un administrador de un hogar de ancianos de Staten Island le dijo a Fox News en una entrevista exclusiva que él y los ejecutivos de otras instalaciones estaban «petrificados» por la infame orden de marzo de 2020 del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, de que los pacientes con COVID positivo sean colocados en centros de atención a largo plazo y no en  los hospitales.

Sin embargo, Michael Kraus le dice a la corresponsal de Fox News, Aishah Hasnie, que sus preocupaciones fueron «rechazadas» por funcionarios estatales.

«Muchas instalaciones lo expresaron», dijo Kraus. «Estaban petrificados, pero estaban más petrificados del Departamento de Salud … una vez que [mi preocupación] fue derribada, nunca volví a hablar [de eso]».

Se confirma que más de 15,000 personas murieron en hogares de ancianos e instalaciones de atención a largo plazo del estado de Nueva York a causa de COVID-19. Sin embargo, tan recientemente como enero de 2021, el estado informó una fracción de ese número, alrededor de 8.500 muertes. Los críticos culpan a la orden de Cuomo, que anuló en mayo de 2020.

El tema fue noticia nacional el mes pasado cuando la principal asesora de Cuomo, Melissa DeRosa, dijo a los legisladores estatales demócratas que la administración del gobernador había ocultado información sobre el número de muertos porque, como ella dijo, «nos congelamos» ante una posible investigación federal. El propio Cuomo reconoció posteriormente que tanto los legisladores estatales como el Departamento de Justicia habían solicitado en agosto de 2020 un recuento completo de las muertes en hogares de ancianos.

A principios de este mes, The New York Times y Wall Street Journal informaron que los principales asesores del gobernador presionaron a los funcionarios de salud durante el verano para que eliminaran los datos de un informe que mostraba que el número de muertes en hogares de ancianos relacionadas con COVID era mayor de lo que se reconocía públicamente en ese momento. .

Según los informes, el asunto está siendo investigado por el FBI y la oficina del fiscal federal de Brooklyn. Cuomo ha admitido que las cosas «deberían haberse hecho de manera diferente», pero no llegó a emitir una disculpa por el fiasco.

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