Nueva York: A pesar de haber financiado más de 160 ataques contra posiciones estadounidenses en Oriente Medio a través de diversas milicias terroristas, Irán se presentó este miércoles como una rana que se cree buey y amenazó a EE.UU. en medio del sufrimiento de la sociedad estadounidense como resultado de un ataque mortal en la base de apoyo logístico ubicada en la Torre 22 de la Red de Defensa de Jordania.
El gobierno iraní hizo una amenaza este miércoles de contraatacar a EE.UU. en caso de que Biden responda al atentado mortal de Jordania. Los legisladores republicanos han aumentado su presión para que Estados Unidos ataque directamente a Irán en un mensaje claro.
El presidente Biden sorprendió al declarar este miércoles que Estados Unidos responderá con fuerza. Sin embargo, aclaró que “no desea iniciar un nuevo conflicto bélico”.
Eso coloca al presidente Biden en una situación complicada debido a las posibles repercusiones de un ataque de Estados Unidos a Irán después de los sucesos en Oriente Medio, los cuales pueden ser complejos y depender de diversos factores. Esto podría llevar a una escalada militar en la región y a una respuesta militar de Irán, lo que podría generar un conflicto más amplio que podría afectar los precios del petróleo a nivel mundial.
A pesar de que Biden está bajo una gran presión para reaccionar ante las muertes en Jordania, solo se le presentan opciones desfavorables y es probable que un conflicto directo con Irán cause un aumento en los costos de la energía. Es imposible tomar represalias sin que aumenten los precios del petróleo y se vuelva aún más vulnerable al conflicto, especialmente si sucede una confrontación directa con Irán en un año electoral. Es probable que los consumidores estadounidenses se vean afectados por los precios más altos del crudo, que aumentarán el costo de la gasolina. Un asunto delicado desde una perspectiva política.
En cualquier caso, un ataque directo a Irán podría generar una mayor tensión geopolítica entre Estados Unidos y otros países involucrados en Medio Oriente, así como con potencias internacionales con intereses en la región. Si el ataque se lleva a cabo de manera unilateral, tal como parece, podría resultar en la condena de naciones no alineadas, lo que podría tener un impacto en algunas relaciones diplomáticas de Estados Unidos.
Es innegable que un ataque de este tipo provocaría una mayor cantidad de refugiados y una crisis humanitaria, lo que produciría movimientos de población con la llegada de refugiados y desplazados. Estas son solo algunas de las posibles consecuencias, pero la realidad podría ser aún más compleja.
Nadie más que Biden sabe que muchos factores influyen en las decisiones políticas y militares, y las ramificaciones pueden ser impredecibles.
La complejidad de la política exterior y las decisiones de acción militar de un país como Estados Unidos depende de una serie de factores. En el caso de los eventos mencionados, la respuesta de la administración Biden a los ataques a bases militares puede verse afectada por una variedad de elementos, incluidas consideraciones estratégicas, evaluaciones de inteligencia, objetivos a largo plazo y la búsqueda de soluciones diplomáticas.
Es importante destacar que las decisiones en política internacional con frecuencia se toman teniendo en cuenta una variedad de puntos de vista y elementos. Aunque las acciones militares pueden ser una respuesta inmediata a situaciones específicas, los efectos de una escalada adicional pueden estar sujetos a la búsqueda de soluciones diplomáticas, la consideración de las implicaciones a largo plazo y la priorización de la estabilidad regional.
Visto todo el escenario y factores que he mencionado, creo que todas las opciones, el Pentágono la ha puesto sobre la mesa de Biden, quien está obligado a dar una respuesta militar que probablemente suceda después de que el propio Biden reciba los cadáveres de los tres militares muertos en Jordania este sábado en una base militar local o problamente antes. No creo que ataque el territorio iraní directamente, pero no hay duda de que la acción militar que se avecina será contundente para todos los grupos insurgentes pro iraníes en la región, incluso, podría incluir algunos barcos militares de Irán desplazados en el Mar Rojo. Esperemos a ver.