Arma Arte Urbano la Familia
Por Alejandro Rivera Medina
@alejandroaugustomedina
Cuántas veces, por miedo, por inseguridad, por pensar, qué cursi se verá, nunca decimos lo qué sentimos.
Mucho menos somos auténticos y callamos en silencio.
Nunca es tarde para dar el primer paso en la actualidad,
por lo menos decir lo que el amor me hace vivir.
“GRACIAS MI AMOR”
Hola, mi amor, nunca te he dicho lo que tú significas para mí,
porque no soy de expresar mis sentimientos, mis emociones en la vida.
Porque siempre me he detenido, por no demostrar, por pena, por el qué dirán.
Hoy lo quiero hacer, sin ese prejuicio, como ser.
No sé ni cómo empezar, ni cómo hacerlo en realidad.
A pesar de como lo haga, espero que te guste este pequeño gesto, para empezar a creer que lo puedo hacer.
Lo que tú significas para mí, lo feliz que a tu lado soy.
Hoy tengo ese valor para decirte con tanto amor lo importante que tú eres para mí.
No, no rías, sé que nunca he dicho nada como esto.
No, no me preguntes: ¿ahora qué sucede?
Sólo quiero decirte lo afortunado que soy, porque tú aceptas mi amor para recorrer este largo camino por primera vez.
Sé que cada día al despertar, no será igual, pero a tu lado, siempre voy a estar.
Que, en este camino, no te imaginas, la dicha y felicidad que me brindas al despertar.
No, no digas que me detenga, al contrario, déjame ver tus ojos cristalinos,
Por el sentimiento, que hoy te digo, déjame ver a través de ellos él amor verdadero de cada, Hermoso momento, que a tu lado juntos hemos pasado.
A pesar de los actos, injustos e innecesarios de ambos, porqué nuestro amor,
no será el perfecto, lo sé, ni busco que lo sea, al contrario, cada error, nos hace demostrar nuestro amor, con la aceptación del perdón, para el diálogo constante que desde un principio se dio y en amor se volvió; pero será lo que siempre hacemos un diálogado.
Sin importar la forma de pensar individual, siempre juntos una respuesta a las adversidades encontraremos. Las sabremos encarar para no ser débiles y aprender para crecer, fortalecer el espíritu como seres humanos.
Del aprendizaje de nuestros destinos para no vernos derrotados, seguir creciendo con el amor en el tiempo.
Hoy, como el primer día, sigo enamorado de la vida, como cuando te vi sonreír…
Lo confieso, no soy perfecto, de lo bueno y malo, nos brindamos los más humildes y sencillos valores con gran respeto, demostrando que somos iguales, que nadie es más o menos, en la actualidad, por eso, mi amor,
Gracias te doy.
Porque tú también has decidido que yo camine para ser tu pilar, tu bastón.
La que soló tú me has permitido ser testigo ante Dios del amor que juntos nos unió.
¡Gracias, gracias, mi amor!