Asistente de Cuomo lo acusa de haberla manoseado y haber hecho avances no deseados

Nueva York: Muchos demócratas destacados que exigieron una investigación
sobre las acusaciones de conducta sexual inapropiada de Christine Blasey
Ford contra el candidato a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh, son menos
francos sobre las acusaciones contra el gobernador de Nueva York, Andrew
Cuomo.

Ford le dijo al Washington Post en 2018 que Kavanaugh la "manoseó" e hizo
avances no deseados en 1982 cuando eran estudiantes de secundaria en
diferentes escuelas.
A principios de esta semana, la ex asistente de Cuomo, Lindsey Boylan,
escribió en una publicación en Medium que Cuomo había hecho avances no
deseados hacia ella, la besó a la fuerza y ​​le sugirió que "jugara al póquer" con
él.
Pero Cuomo había calificado la eventual confirmación de la Corte Suprema
de Kavanaugh como una "farsa" y dijo que energizaría a los estadounidenses
"para luchar aún más duro por nuestra visión compartida de un futuro mejor
para todos".
También sugirió que el nuevo juez de la Corte Suprema se hiciera una prueba
de polígrafo.
La Casa Blanca pareció distanciarse de Cuomo el jueves, y la secretaria de
prensa Jen Psaki dijo que "cualquier acusación debería ser revisada".
Los senadores Dianne Feinstein, Amy Klobuchar, Mazie Hirono, Patrick Leahy,
Cory Booker, Richard Blumenthal, todos los cuales se encontraban entre los
miembros demócratas del Comité Judicial del Senado durante las audiencias
de nominación de Kavanaugh en 2018, no respondieron a las preguntas
sobre si las alegaciones de Ford eran cualquier diferente de los de Boylan.
Los demócratas habían pintado las acusaciones contra Kavanaugh como al
menos dignas de una investigación y posiblemente descalificables, mientras
que sus homólogos republicanos argumentaron que tenía derecho al debido
proceso.