Ataque de 1992 al compañero de cuarto de Buffalo defiende la llamada tardía del compañero de cuarto de Idaho a la policía y solicita que los medios de comunicación “retrocedan”.

Después de confrontar al presunto asesino de los asesinatos de Idaho, un compañero de cuarto tardó varias horas en avisar a las autoridades.

El lunes, a pesar de las crecientes preocupaciones por su retraso de ocho horas en notificar a la policía, una mujer que descubrió a su compañero de cuarto de la universidad casi muerto hace más de tres décadas salió en defensa del compañero de cuarto sobreviviente en los asesinatos de la Universidad de Idaho.

Alanna Zabel, de 50 años, le dijo a Fox News en una entrevista de “America Reports” que “realmente espera que los medios puedan retroceder un poco… y permitirle sanar porque será un proceso largo”.

La compañera de cuarto sobreviviente de Idaho, D.M., está bajo la presión del público para que aclare por qué, la mañana del 13 de noviembre, cuando se encontró cara a cara con el presunto asesino, no llamó a la policía de inmediato.

Estoy seguro de que ella estaba tratando de conectar los puntos, comentó Zabel.

Cuando D. M. “Escuchó el llanto y vio una figura vestida de negro con una máscara que ocultaba la boca y la nariz de la persona que se dirigía hacia ella”, asegura su abogado que estaba inmovilizada por el pavor y con miedo de salir de su dormitorio. Las cuatro víctimas fueron asesinadas a puñaladas entre las tres y las cuatro de la madrugada. En lugar de una posible víctima de asesinato, se hizo una llamada de auxilio a la policía a las 11:58 a. m. para una persona inconsciente. Goncalves y Madison Mogen, ambos de 21 años, su compañera de cuarto Xana Kernodle, de 20, y su novio Ethan Chapin, de 20, fueron encontrados por la policía cuando llegaron alrededor del mediodía.

El comentario de la compañera de cuarto esa mañana conmovió profundamente a Zabel, quien ha hablado de los extraños paralelismos entre su propia experiencia y el aterrador triple asesinato en Idaho.

Mientras estudiaba en la Universidad de Buffalo en 1992, Zabel dice que cuando descubrió a su compañera de cuarto casi muerta en una casa de tres pisos con cinco hermanas de la hermandad Chi Omega, entró en modo de supervivencia y no pudo digerir mentalmente lo que había presenciado.

Un mal olor se apoderó de Zabel cuando entró en la habitación de su amiga para rogarle que moviera su automóvil. Zabel afirmó que no había visto sangre en ese momento y pensó que la niña había muerto por asfixia con su vómito.

Zabel solo reconoció que la habitación estaba cubierta de sangre y que su incapacidad inicial para percibirlo fue una respuesta traumática cuando llegaron los paramédicos y comentaron sobre el volumen de sangre. Luego se enteró de que su compañera de cuarto había sido golpeada y agredida sexualmente de manera horrible.

No se veía sangre, pero había mucho líquido, por lo que Zabel supuso que la mujer se había ahogado con su vómito y estaba inconsciente. “El paramédico no se detuvo y dio un paso atrás diciendo: ‘Oh, Dios mío, mira toda la sangre’, hasta que llegaron los paramédicos y yo lo estaba siguiendo por el pasillo. La audiencia se llenó de inmediato tan pronto como pronunció ‘sangre’. “Estaba cubierta de sangre y el colchón estaba saturado en un 75 por ciento. No me había dado cuenta antes. Tu mente tomará las precauciones necesarias para mantenerte a salvo cuando estés en ese intenso estado de terror y supervivencia”.

“La mente es algo poderoso”, continuó Zabel, “y cuando vives con otras cinco personas y es un aspecto muy festivo, la vida universitaria donde podría ser una broma de fraternidad, o hay varias personas moviéndose por la casa en todo momento , siempre quieres asumir que no es el peor de los casos”.

El ex detective de LAPD Mark Fuhrman elogió a D.M. por abrir la puerta tres veces cuando escuchó un ruido proveniente de una parte diferente de la casa y finalmente encontrarse cara a cara con el culpable el lunes en “America Reports”. Debido a su contacto, pudo dar a las autoridades una descripción completa del hombre, lo que les permitió identificar al sospechoso, Bryan Kohberger, como el asesino.

“Finalmente vio al sospechoso.

Sin esa descripción tan precisa del sospechoso, particularmente las cejas pobladas, nunca hubieran podido conectar el Elantra con las características físicas de Bryan Kohberger”, dijo Fuhrman.

Zabel suplicó al público que le diera a D.M. el tiempo y el espacio que requiere para procesar el trauma que experimentó ese día, diciéndole a la presentadora de Fox News, Sandra Smith, que según su propia experiencia, la “curación rápida” no es posible.

“Me alejé de eso. Hace 30 años, la gente no preguntaba si estabas bien o si necesitabas consejería, mi universidad no me dio extensiones y era una era muy diferente”, habló. “A ella también le desagradan quienes la critican en las redes sociales y le dicen lo que debería haber hecho. Nadie sabe qué habría hecho en esa circunstancia, así que lo único que podemos hacer es apoyarla y esperar que también esté trabajando con un profesional. como una familia amorosa y amigos para ayudarla a superar esto porque no será una recuperación rápida, dijo. Por el resto de su vida, llevará esto”.