Cientos de miles huyen de la costa de Estados Unidos antes del huracán Laura
GALVESTON, Texas (AP) – En la mayor evacuación de la pandemia en Estados Unidos, más de medio millón de personas recibieron la orden de huir de la costa del Golfo el martes cuando Laura se convirtió en un huracán que, según los meteorólogos, podría azotar Texas y Luisiana con vientos feroces, fuertes. inundaciones y el poder de empujar el agua de mar millas tierra adentro.
Se ordenó a más de 385,000 residentes que huyeran de las ciudades de Beaumont, Galveston y Port Arthur en Texas, y a otros 200,000 se les ordenó que abandonaran la parroquia de Calcasieu en el suroeste de Louisiana, donde los meteorólogos dijeron hasta 13 pies (3.96 metros) de marejada ciclónica. coronado por olas podría sumergir comunidades enteras.
El Centro Nacional de Huracanes proyectó que Laura obtendría energía de las cálidas aguas del Golfo y se convertiría en un huracán de categoría 3 antes de tocar tierra el miércoles por la noche o el jueves temprano, con vientos de alrededor de 185 kph (115 mph). El fortalecimiento puede ralentizarse o detenerse justo antes de tocar tierra, dijeron los meteorólogos.
“Las aguas son lo suficientemente cálidas en todas partes como para soportar un gran huracán, Categoría 3 o incluso superior. Las aguas son muy cálidas donde está la tormenta ahora y lo serán durante todo el trayecto hasta la costa del Golfo ”, dijo el subdirector del Centro Nacional de Huracanes, Ed Rappaport.
Se esperaba que el agua del océano llegara a tierra a lo largo de más de 450 millas de costa desde Texas hasta Mississippi. Se emitieron advertencias de huracán desde San Luis Pass, Texas, hasta Intracoastal City, Louisiana, y advertencias de marejada ciclónica desde el sistema de protección contra inundaciones de Port Arthur, Texas, hasta la desembocadura del río Mississippi.
Las evacuaciones podrían ser aún mayores si la trayectoria de la tormenta se desvía hacia el este o el oeste, dijo Craig Fugate, exjefe de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.
Los funcionarios instaron a las personas a quedarse con familiares o en habitaciones de hotel para evitar la propagación del virus que causa COVID-19. Los autobuses estaban equipados con equipo de protección y desinfectante, y llevarían menos pasajeros para mantener a las personas separadas, dijeron funcionarios de Texas.
Whitney Frazier, de 29 años, de Beaumont pasó la mañana del martes tratando de conseguir transporte a una escuela secundaria donde pudiera abordar un autobús para salir del área.
«Especialmente con todo lo relacionado con COVID que ya está sucediendo además de una evacuación obligatoria, es muy estresante», dijo Frazier.
La tormenta también puso en peligro un centro de la industria energética estadounidense. Las refinerías de petróleo y las plantas de gas natural licuado que salpican la región podrían cerrar a lo largo de la costa, y el gobierno dijo que los trabajadores fueron retirados de más del 40% de las 643 plataformas que normalmente cuentan con personal en el Golfo.
Si bien los precios del petróleo a menudo se disparan antes de una gran tormenta a medida que la producción se desacelera, es poco probable que los consumidores vean grandes cambios de precios porque la pandemia diezmó la demanda de combustible.
