Confiscan en Bélgica 350 kilos de cocaína enviados desde RD en avión en medio de la pandemia
NUEVA YORK._ Las autoridades anti drogas de Bélgica, confiscaron la semana pasada 350 kilos de cocaína enviados en un avión desde la República Dominicana al país europeo en medio de la pandemia.
Medios estadounidenses como el periódico Decaan Herald, publicaron el miércoles que la información suministrada por la Policía Europea (EUROPOL), sostiene que los carteles se están aprovechando de la brecha generada por el COVID-19 que redujo la cantidad de vuelos y de productos agropecuarios importados desde países de América Latina y El Caribe.
La cocaína procedente de República Dominicana, llegó en el avión que aterrizó en el aeropuerto de Zaventem, a mediados de marzo, cuando la propagación de coronavirus estaba comenzando a matar a cientos de miles de víctimas en Europa y Estados Unidos.
Bélgica comenzó el cierre de sus fronteras en esa fecha, suspendiendo los vuelos comerciales.
Otros detalles sobre el cargamento de la droga desde República Dominicana, no fueron divulgados de inmediato, pero se dijo que la cocaína estaba escondida en maletas.
Tampoco se identificó al o los pasajeros que sirvieron como “mulas” para transportar la droga desde El Caribe a Europa.
Los investigadores dijeron que la cantidad de la cocaína confiscada es 200 veces mayor de la que rutinariamente se detecta en las mulas que son usadas en la República Dominicana.
Las autoridades no dijeron si hay arrestos en relación al cargamento.
Explicaron que los capos de la droga latinoamericanos han enviado grandes cantidades de cocaína a Europa en las últimas semanas, incluido uno en un cargamento de calamares, a pesar de que la epidemia de coronavirus ha sofocado el comercio transatlántico legítimo.
Añaden que la industria de las drogas ilegales ha sido interrumpida por el virus, con las cadenas de suministro internacionales detenidas y millones de clientes bloqueados.
Pero los capos de la droga se las están ingeniando para enfrentar el desafío mandando enormes cargas de cocaína en barcos que transportan contenedores y aviones comerciales en vuelos, dando una señal de que estaban listos para asumir mayores riesgos para entregar sus mercancías.
Los envíos de drogas han continuado aunque de que muchos países europeos, incluidos los principales mercados como Inglaterra y España, aplicaron las restricciones por COVID-19 a sus ciudadanos.
En los primeros tres meses de este año, la UNODC confiscó 17.5 toneladas de cocaína con destino a Europa en puertos sudamericanos, en su mayoría brasileños. Eso representó un aumento de casi el 20 por ciento en comparación con el mismo período en 2019, dijo Van Den Berghe.
Este mes, las autoridades belgas confiscaron casi cinco toneladas de cocaína en un contenedor de América Latina en el puerto de Amberes, que el año pasado fue el principal punto de entrada de Europa para la cocaína con más de 60 toneladas interceptadas allí.
Eso siguió a varias incautaciones de más de una tonelada en marzo, dijo Kristian Vanderwaeren, jefe de aduanas de Bélgica, que se cerró el 17 de marzo.
El aumento de las grandes cargas de cocaína en los contenedores de envío siguió una tendencia similar con los aviones, dijo Vanderwaeren.