Covid: Ómicron proviene de los ratones, dicen científicos chinos
La variante Ómicron de Covid fue identificada por primera vez en África en noviembre pasado. Desde entonces llamó la atención de la comunidad médica internacional por su gran cantidad de mutaciones, algunas que no se habían observado en variantes anteriores. Por ello, científicos chinos señalan que Ómicron proviene de los ratones, donde incubó, se estabilizó y luego saltó hacia los humanos.
Los investigadores de la Academia de Ciencias de China, en Beijing, analizaron el espectro molecular de mutaciones de la variante Ómicron y encontraron que el paciente en el que evolucionó esta transformación pudo no haber sido humano, sino un roedor, pues se adaptó para infectar las células de estos animales.
“Nuestros resultados sugieren que el progenitor de Ómicron saltó de humanos a ratones, rápidamente acumuló mutaciones conducentes a infectar a ese huésped y luego saltó de regreso a los humanos, lo que indica una trayectoria evolutiva entre especies para el brote de Ómicron”, escriben los expertos chinos en genética y biología.
Los autores también señalan las tres hipótesis sobre el origen de Ómicron destacadas entre la comunidad científica hasta el momento: que se desarrolló en una población humana del mundo con poca vigilancia viral; que evolucionó en un paciente con una padecimiento inmunodepresor contagiado de Covid; o que pudo haber acumulado sus numerosas mutaciones en un huésped no humano para luego saltar a los humanos. Y sabemos que los roedores son una especie con un contacto estrecho con las personas, y que esencialmente el Covid-19 es uno de muchos coronavirus que habitan en humanos y animales.
“El espectro molecular de las mutaciones de Ómicron previas al brote no concuerda con la historia evolutiva de los seres humanos”, pero sí con una historia evolutiva en ratones, escriben los científicos en su estudio publicado en el Journal of Genetics and Genomics.
“Descubrimos que el espectro molecular de las mutaciones de Ómicron antes del brote era inconsistente con la rápida acumulación de mutaciones en humanos, y que sugería una trayectoria en la que el progenitor de Ómicron experimentó un evento zoonótico inverso de humanos a ratones en algún momento durante la pandemia (muy probablemente a mediados de 2020) y mutaciones acumuladas en un ratón huésped durante más de un año antes de volver a los humanos a fines de 2021”, señalan los científicos chinos.
Es decir que, según estos hallazgos, Ómicron saltó primero de humanos a ratones en algún momento del año 2020. En los roedores evolucionó y se adaptó para saltar de nuevo a los humanos a finales de 2021… y hénos aquí en medio de una ola mundial de contagios que ha alcanzado máximos históricos.
“Los seres humanos representan el reservorio más grande conocido de SARS-CoV-2 y con frecuencia entran en contacto con otros animales, incluidos animales de ganado, mascotas o animales salvajes que invaden hogares en busca de alimento y refugio”, se lee en la investigación.
“Dada la capacidad del SARS-CoV-2 para saltar a través de varias especies, parece probable que las poblaciones globales enfrenten variantes adicionales derivadas de animales hasta que la pandemia esté bien controlada. Por lo tanto, nuestro estudio enfatiza la necesidad de vigilancia viral y secuenciación en animales, especialmente aquellos en contacto cercano con humanos”, concluyen.