Daño de la pantalla en concierto de Luis Miguel conlleva pérdidas millonarias y desprestigio
El fallo de la pantalla central en el concierto de Luis Miguel, que motivó la posposición del evento un día después, acarrea pérdidas millonarias para la producción, además de escándalo y desprestigios por tratarse de un artista de la envergadura del Sol de México.
N Digital consultó a varios promotores y productores de eventos multitudinarios, quienes indicaron que las consecuencias económicas son muy cuantiosas.
Explicaron que la pantalla central “es parte vital del espectáculo”, ya que cada canción de un artista de la dimensión de Luis Miguel, cuenta con un concepto de contenido que debe ir proyectado.
Además, ameritaba presentar el show con la profesionalidad que conlleva y por tanto, se hacía imposible que saliera al escenario con la pantalla apagada, a pesar de que la orquesta, el sonido y el público estaban dispuestos.
¿Qué implica posponer un espectáculo?
De acuerdo a los expertos consultados, son varios los factores que se ven afectados a la hora de aplazar un show por cualquier situación técnica.
Entre ellas describe los costos, destacando que esto implica aumentar los días de contrato del personal adquirido para la actividad, estadía del artista y su equipo, entre otros.
También, explicó que se ve afectada la logística del evento, ya que en ocasiones el artista cuenta con un itinerario que debe agotar.
Corresponde al productor del evento asumir la responsabilidad del suceso, lo que implica una pérdida cuantiosa de dinero.
CANCELACIÓN DEL CONCIERTO
Se recuerda que el concierto de Luis Miguel fue pospuesto para este jueves a las 8:00 de la noche en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, evento que fue víctima de supuestas fallas técnicas que impidieron su realización.
El concierto, el primero de “El Sol de México” en este 2024 estaba previsto a iniciar a las 9:00 de la noche.
República Dominicana es el primer país al que Luis Miguel se traerá su tour del 2024.
Luego, el Sol de México viajará a Centro y Sur América para después regresar a Estados Unidos, donde tocará 32 fechas, arrancando el 4 de abril en Seattle, Washington y terminando el 16 de junio en Greensboro, North Carolina.
