Debate ideológico o económico: desentrañando la prioridad en la política dominicana
Santo Domingo, RD: En 1789, durante la Asamblea Nacional Francesa, en medio de una revuelta que buscaba poner fin a la aristocracia y la monarquía, surgió un debate crucial. Durante los meses de agosto y septiembre de ese año, los miembros de la Asamblea se vieron ante la decisión de si el rey de Francia podría vetar leyes aprobadas por mayoría en el parlamento. Esta capacidad de veto real dividió a la Asamblea, marcando el comienzo de las clasificaciones políticas de izquierda y derecha.
Izquierda: Hoy en día, ser de izquierda significa abogar por la equidad, la justicia social y la intervención del Estado en asuntos sociales y económicos. Implica el uso de los recursos estatales para ayudar a la población, especialmente a los más necesitados, la defensa de los derechos laborales, la promoción de la diversidad e inclusión, la participación ciudadana y otros aspectos sociales tanto públicos como privados. Las ramas ideológicas de la izquierda incluyen el socialismo, el comunismo, el progresismo, el ecologismo y la social democracia, entre otros.
Derecha: En contraste, ser de derechas hoy se centra en valores como la libertad individual, la preservación de las instituciones familiares, la limitación del poder estatal en la economía y la vida cotidiana de los ciudadanos, así como el patriotismo. Las ramas ideológicas de la derecha abarcan el nacionalismo, el conservadurismo, el liberalismo clásico, el populismo y el fascismo, entre otros.
Centro: Existe también una posición intermedia, el centro, que busca la moderación entre las ideologías de izquierda y derecha. Caracterizado por el pragmatismo, el compromiso, una economía mixta, principios democráticos, estabilidad política, entre otros.
En la República Dominicana, las ideologías políticas a menudo no dividen a las organizaciones políticas. Lo que motiva a los ciudadanos a involucrarse en la política no es siempre la adhesión a una ideología, sino lo que coloquialmente se conoce como «la teta del Estado». Ejemplos abundan, como el Movimiento Verde o la Concentración de la Plaza de la Bandera, que fueron liderados por miembros de la oposición y algunos líderes de la sociedad civil, y que posteriormente ocuparon cargos en el gobierno actual (2023) del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Clientelismo, lo que se le llama a favorecer a personas, organizaciones, partidos políticos o movimientos sociales para lograr su apoyo es la ideología madre de nuestra nación, en su gran mayoría los ciudadanos Dominicanos usan este método para aplicar el voto, no desde el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Si no desde el régimen del dictador Rafael Trujillo, donde para consolidar su poder, dentro de tantas medidas se usó el clientelismo, en el 2023 que es el año en el cual escribo este argumento, la cosa no ha cambiado nada.
Tanto jóvenes como envejecientes, en su mayoría repito, votan esperando, ese cargo, ese sobrecito, ese favor, no siguen ni las pasiones personales, ni las ideológicas ni las nacionales, dígase que independientemente de las ideas que los políticos coloquen en el debate, gran parte del pueblo votara pensando en ese favor que en su futuro, harán caso omiso a las ideas del mañana para elegir el pica pollo y los quinientos o mil pesos de que se le darán hoy (Refiriéndome al dia de las elecciones o “El Día De”), Finalmente, el clientelismo político es un desafío que afecta profundamente a nuestro país, pero no es insuperable. Con una presión de reformas, unidad civil, conciencia ciudadana y compromisos democráticos, podemos zanjar el camino hacia un futuro donde la justicia y la equidad sean la norma, merecemos como Dominicanos un sistema que esté a disposición de nuestras necesidades como pueblo, todo lo dicho se puede lograr, pero juntos.
