Denuncian agente policial por abuso de poder en Gaspar Hernández

Gaspar Hernández, Espaillat.– En el municipio de Gaspar Hernández, varios ciudadanos han emitido una denuncia pública en contra de un agente de la Policía Nacional, identificado por el apodo de “Candao”, quien presta servicio en los distritos municipales de la zona.
De acuerdo con múltiples testimonios ofrecidos por residentes de la comunidad, el agente ha sido señalado por actuar de manera agresiva y autoritaria. Aseguran que su comportamiento amenaza la convivencia pacífica y ha generado malestar generalizado.
Los afectados describen al agente como alguien que utiliza su posición para intimidar. Han expresado su preocupación por lo que consideran una actitud recurrente y hostil hacia los ciudadanos, lo que afecta directamente la tranquilidad local.
Una de las denuncias más graves se refiere a una supuesta declaración del propio agente. Según afirman los denunciantes, este ha dicho que “ni el coronel ni nadie lo manda”, lo que evidencia, según ellos, una falta de respeto a la cadena de mando.
Esa afirmación ha sido interpretada como una señal de desprecio hacia la estructura jerárquica de la institución, lo que ha elevado el nivel de preocupación entre los residentes del municipio y sus alrededores. “Como ciudadano afectado, exijo que las autoridades competentes investiguen su conducta y tomen acciones concretas para proteger los derechos y la seguridad de todos”, declaró uno de los afectados en medio de la denuncia colectiva.
Los comunitarios han hecho un llamado firme a las autoridades correspondientes para que se realice una investigación exhaustiva sobre la conducta del agente. Consideran que su comportamiento no debe quedar impune.
Además, piden que se garantice un ambiente seguro y respetuoso para todos los ciudadanos. La población espera que sus reclamos sean escuchados y que se tomen medidas disciplinarias si se confirman las acusaciones.
La situación ha generado inquietud entre los residentes, quienes dicen sentirse vulnerables frente a la conducta del agente. La comunidad insiste en que su intención no es atacar a la institución, sino velar por el respeto de sus derechos.
Las autoridades aún no han ofrecido una declaración oficial sobre el caso. Mientras tanto, los denunciantes mantienen su solicitud de intervención inmediata por parte de los organismos correspondientes.