Desmantelan laboratorio clandestino con más de 220,000 pastillas de fentanilo cerca de otra guardería de El Bronx
Otro laboratorio clandestino de fentanilo fue desmantelado en El Bronx durante la presente semana, y lo alarmante es que operaba a solo tres puertas de distancia de un centro de cuidado infantil. Cuando las autoridades llevaron a cabo el allanamiento, descubrieron que las máquinas para producir estas peligrosas píldoras estaban en pleno funcionamiento en el sótano de la vivienda ubicada en Beaumont Avenue, cerca de East 187th Street, en el vecindario de Belmont.
Esta operación ilegal logró fabricar al menos dos docenas de kilogramos de fentanilo, que equivalen a unas 222,000 píldoras. Afortunadamente, todas estas sustancias peligrosas fueron incautadas en el lugar. Un detalle preocupante es que justo a la vuelta de la esquina se encuentra el Belmont Community Day Care Center, que incluso cuenta con un parque infantil adjunto.
El descubrimiento de esta operación clandestina tuvo lugar aproximadamente un mes después de que un niño de un año, Nicholas Feliz Dominici, muriera a causa de una sobredosis de fentanilo en el centro de cuidado infantil Kingsbridge en el Divino Niño Daycare. En ese incidente, otros tres niños también se enfermaron debido al fentanilo que circulaba en el lugar, que resultó ser un centro de venta de esta droga.
Posteriormente, la semana pasada, se realizó la incautación de más de 40 libras de fentanilo, con un valor estimado de 1.5 millones de dólares, en lo que se presume era otro laboratorio de drogas en un apartamento ubicado a tan solo seis cuadras del centro de cuidado infantil del Bronx donde ocurrió la trágica muerte de Nicholas.
En la operación policial del jueves en Beaumont Avenue, cuatro hombres fueron arrestados en la vivienda, donde se encontraron tabletas de fentanilo y maquinaria para la fabricación de estas píldoras. Los individuos arrestadosenfrentan cargos de conspiración para distribuir o poseer una sustancia controlada de más de 8 onzas.
Los residentes locales se mostraron preocupados por la proximidad de estas operaciones ilegales a sus hogares y expresaron su deseo de mudarse de la zona debido a la amenaza que representan para la seguridad de sus familias.
