Diagnóstico temprano: clave para que los niños sordos aprendan a hablar antes de los cuatro años
El pasado 18 de abril, el otorrinolaringólogo Frank Betances, oriundo de La Vega, recibió el primer premio de Innovación en Salud, que concede la Agencia Gallega de Conocimiento en Salud a los proyectos más novedosos desarrollados por profesionales del sistema público gallego, por una plataforma que desarrolló para impartir terapias del habla a niños sordos de 1 a 4 años.
Se conversó con el galeno, quien afirmó que el principal inconveniente en República Dominicana para reducir la población de niños sordos es el diagnóstico tardío.
«Para poder hablar, primero hay que escuchar. Si los niños no oyen, es imposible que hablen. En España no hay escuela para sordos, aquí todos los niños oyen y hablan, porque se diagnostican temprano», explicó Betances.
El otorrino indicó que hay una ventana muy corta en la cual debe hacerse el diagnóstico y abarca los primeros cuatro años de vida del infante, mucho mejor si se inician las terapias antes de cumplir los dos años de edad.
«Los niños si no se tratan antes de los dos años y medio, se quedan sordomudos para siempre. Mientras más temprano reciban las terapias de rehabilitación, mucho mejor van a hablar esos niños. El lenguaje no es solo hablar, también es pensamiento», comentó.
«En República Dominicana hay más niños sordos porque se diagnostican tarde y se tratan más tarde», agregó.
Tomando en cuenta el sistema sanitario implementado en España, donde el 99 % de los servicios son de carácter público y prima la medicina preventiva sobre la paliativa, Betances se inspiró para crear una plataforma digital que integre a todos los actores (médicos, pacientes y sus padres o tutores) para garantizar terapias a tiempo y de manera eficaz.
«Como el período de tratamiento es muy cortito, que son los primeros cuatro años de vida, intentamos utilizar las herramientas digitales con las que contamos hoy para que esta rehabilitación sea lo más rápida y eficiente y no solo tengan que desplazarse a un centro a recibirla, sino que puedan recibir la terapia en casa, siempre bajo la supervisión de los padres».
Betances destaca que este aspecto es muy importante, porque «para que estas cosas funcionen, dependen de lacolaboración de los padres«.
Más que una aplicación, el especialista la define como una plataforma de rehabilitación digital para que se use en centros hospitalarios de atención temprana, para coordinar la actuación en equipo de todos los profesionales de salud que intervienen con el paciente y las terapias en casa, para aprovechar el periodo crítico de desarrollo.
«Es una plataforma de trabajo profesional, por eso fue que ganó el premio de innovación», aclaró el galeno.
¿Cómo funciona la App?
La plataforma registra todos los datos clínicos del niño, las pruebas que se le han hecho, notas de los médicos que han permitido llegar al diagnóstico exacto y el tipo de ejercicios y estimulación que el infante requiere. A su vez, coordina con los padres la realización de los ejercicios en casa, controlándolos con inteligencia artificial.
Ese control por voz permite a los médicos verificar que los ejercicios se están realizando se forma adecuado, quitando el sesgo de subjetividad que pudiera darse entre opiniones humanas.
Cada niño lleva un programa individualizado de acuerdo a sus capacidades, habilidades y evolución. Las sesiones se promedian para que el niño reciba al menos una hora de estimulación al dia, pero dependerá de las necesidades del niño y de la brecha disponible en la ventana antes de cumplir los cuatro años.
«Los niños si se diagnostican antes del primer año de vida, todos hablan», garantizó el otorrino quien emigró a Galicia en 2013 para especializarse, luego de obtener su título en medicina en la Universidad Católica del Cibao (Ucateci).
«No tiene sentido que los niños se queden sordos cuando es una enfermedad tratable«, destacó.
A los pequeños que padecen de sordera total se les coloca un implante y si es una sordera moderada, llevan un audífono. Todos los gastos quedan cubiertos por el Gobierno de España.
El gran anhelo del doctor es que la App, que se mantiene en etapa de prueba en un hospital de Lugo, y fue creada con el fin de reducir el tiempo de espera (citas) para los niños recibir la rehabilitación, optimizar la rehabilitación, que sea más barato para los sistemas de salud, pueda desarrollarse en todos los países de habla hispana, sobre todo, los países en vías en desarrollo, «que son los que más la necesitan».
Desde la idea inicial hasta la fase de prueba en la que se encuentra, a Betances le tomó un año de desarrollo, proyecto elaborado con 40 mil euros cedidos por su gobierno local para fines de investigación.
«Ojalá que esto sirviera de alguna forma para mejorar el ritmo en que (los niños dominicanos) reciben las atenciones con calidad y que fueran más eficientes», deseó.
Toda la plataforma está ideada para que funcione con internet, en una nube, donde se almacena la data del paciente y sus ejercicios.