¡Dictadura en el PRM!

Por Alexander Olivence

Se dice llamar un partido del pueblo, democrático, diferente, pero, en realidad sus dirigentes son peores que sus adversarios. El partido del cambio ha impuesto en sus dirigentes imposiciones tantos en su organización como en los diferentes departamentos del gobierno.

Desde el primer año presidencial el partido del cambio nombra cónsules, para que estos sean que dirijan el partido en vez de ejercer su trabajo diplomático. Así dejando afuera del juego a los dirigentes que conocen su demarcación; lo peor que utilizan los recursos para hacer politiquería barata repartiéndose estos entre sus esposos (as) y hermanos.

Nombran a sus familiares en el exterior en consulados,  embajadas y oficinas de turismo para que estos paguen sus estudios y los dirigentes que están Todavía esperanzados de algo, “como indios.”