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Diez de la narco banda dominico boricua “Trinidad” acusados de seis asesinatos, secuestros, armas y tráfico de drogas en Pensilvania

Los miembros de la narco banda, utilizaron violencia, secuestros y seis intentos de asesinatos en menos de dos meses para controlar y ampliar el territorio donde vendían heroína, fentanilo y otras sustancias peligrosas controladas, dijo en un comunicado el fiscal federal del distrito  Este en Pensilvania William McSwain.  
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NUEVA YORK._ Diez integrantes de la violenta narco banda “Trinidad”, integrada por dominicanos y boricuas y que operaba en la ciudad de Reading en Pensilvania, con una gran población dominicana, fueron  acusados esta semana en la corte federal de Filadelfia de seis asesinatos contra rivales por el control de territorios, secuestros, armas, tráfico de drogas y conspiración.

Los fiscales sindican a Jesús Feliciano Trinidad (Chewy), de 29 años de edad, como el principal líder del grupo criminal.

Los miembros de la narco banda, utilizaron violencia, secuestros y seis intentos de asesinatos en menos de dos meses para controlar y ampliar el territorio donde vendían heroína, fentanilo y otras sustancias peligrosas controladas, dijo en un comunicado el fiscal federal del distrito  Este en Pensilvania William McSwain.

Los narcos también son acusados de posesión de armas de fuego para promover una conspiración de narcotráfico, secuestros y otros múltiples cargos por distribución de drogas.

Seis miembros del grupo fueron acusados previamente en marzo de cargos de drogas y armas. Los nuevos cargos alegan que los miembros del grupo cometieron numerosos secuestros y utilizaron la violencia, incluido un cuádruple homicidio en enero de 2018, para controlar a las personas involucradas en el tráfico de drogas en Reading.

«Los acusados actuales ahora enfrentan algunos de los cargos más graves y violentos que existen bajo la ley federal», dijo el fiscal McSwain en una conferencia de prensa con el fiscal del distrito del condado de Berks John Adams y oficiales de las agencias policiales locales y federales.

«En su forma de ser, esta organización creó el caos en la ciudad de Reading», dijo Adams, quien anteriormente llamó al grupo de Trinidad la organización de drogas más violenta que las autoridades de la de la lucha contra las drogas habían enfrentado.

Según el expediente, los miembros del grupo, cometieron los asesinatos y secuestros en 2017 y 2018.

Además de Feliciano Trinidad, los otros acusados por los asesinatos son Yomar Velázquez Figueroa, Fitzgerald Daliot Rios, Dewayne Quiñones, Pedro Sánchez Laporte, Ángel Rivera Silva y Mayco Álvarez Jackson.

Se enfrentan a posibles sentencias de ejecución si son declarados culpables.

Mariela Alvarado y Owen Malavé Medina, son acusados de múltiples delitos de drogas y armas y se enfrentan a cadenas perpetuas si son declarados culpables.

Lilian García Ortiz, también está acusada de narcotráfico.

Feliciano Trinidad, Velázquez Figueroa y Daliot Ríos son acusados de asesinar  a Miguel Reyes en diciembre de 2017, que era un rival en el control de los territorios.

Según la acusación, los mismos tres hombres, junto con una persona ahora muerta y otra no identificada que es acusada por separado, también secuestraron a Héctor González Rivera porque no cumplió el encargo de  asesinar   un narcotraficante rival de Feliciano Trinidad i y no devolvió el arma que le proporcionó el líder de la narco banda.

Mantuvieron  raptado a González Rivera en el sótano de una casa en Reading. Allí, Feliciano Trinidad y Álvarez Jackson lo golpearon con los puños y un pedazo de madera.

No le dieron comida ni agua durante varios días hasta que Feliciano Trinidad ordenó a Velázquez Figueroa y Daliot Ríos que lo mataran inyectándole una sobredosis letal de drogas.

Cuando la sobredosis de drogas no mató a González Rivera, lo forzaron a entrar en un callejón y le dispararon en la cabeza, dijeron los fiscales.

Se alega que Feliciano Trinidad, Velázquez Figueroa, Quiñones y Sánchez Laporte mataron a Jarlyn Lantigua Tejada, Juan Rodríguez, Nelson Onofre y Joshua Santos el 28 de enero de 2018, para expandir el territorio de sus operaciones de narcotráfico.

Otros actos de violencia en la acusación incluyen hacer múltiples disparos contra una casa utilizada por un traficante de drogas rival y secuestrar a un hombre para obligarlo a pagar sus deudas de drogas.

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