El Edificio del Estado Dominicano en Nueva York
Es innegable que esta administración consular actual ha empezado el proceso de saldar la deuda social del Estado dominicano con su comunidad residente en el exterior, de manera muy especial, en la Gran Manzana. El señor Eligio Jáquez, Cónsul General, ha emprendido -con entusiasmo y determinación- el reencuentro del Gobierno con la ciudadanía de origen quisqueyano y ya se le considera como “el cónsul que más se ha relacionado con nosotros” en toda la historia de la migración dominicana a USA.
Su trabajo es admirable, porque no solo ha logrado eficientizar los servicios consulares, sino que, nos ha hecho la vida más fácil, acercando el Gobierno y sus dependencias a los quisqueyanos que pudiéramos necesitar algún trámite administrativo en nuestro país. Con esa finalidad de servir, más de una docena de instituciones oficiales se han establecido ya, en las instalaciones del Consulado de Nueva York, en Times Square y otras tantas esperan por hacerlo.
Las oficinas de la Junta Central Electoral, Pasaportes, Aduanas, Instituto Postal, UASD, INTRANT, Pro Dominicana, SENASA, Familia Feliz, INDEX, Jubilaciones y Pensiones, Gabinete de Política Social, Defensor del Pueblo, Tribunal Constitucional, Ministerio de Interior y Policía, entre otras, disponen de un espacio en el local del Consulado en NY pero, es necesario que se disponga de mayor área para el público, a fin de hacer más eficientes los servicios a una comunidad que se lo merece, por su solidaridad con el Estado y pueblo dominicanos.
En el orden de la interrelación con los estamentos de cogobierno de esta nación, el Consulado General ha desarrollado y mantenido relaciones de colaboración cercana con todos los oficiales cuyas funciones nos atañen -ya sean elegidos o nombrados- de forma tal que, los dominicanos siempre son bienvenidos cuando ameritan algún trámite propio de la burocracia administrativa de la ciudad, el estado o el gobierno federal.
Pero quizás, lo más meritorio del cónsul Jáquez ha sido la calidez y solidaridad que ha mantenido en su conexión con la comunidad que representa en el área tri estatal y en todo Estados Unidos. Los dominicanos cuentan con Eligio, tanto en Nueva York como en República Dominicana, porque es un facilitador natural; y esa disposición de servicio la demanda de cada uno de los hombres y mujeres que trabajan bajo su mando.
Sin embargo, a lo que me quiero referir en esta ocasión, no es a lo que ya ha realizado el Cónsul General en NYC sino, a lo que le falta por hacer. Hay varios asuntos en los que el honorable Eligio Jáquez debe interponer sus buenos oficios ante el Gobierno dominicano, a fin de satisfacer ciertas demandas nuestras en el país. Pero, el asunto que hoy me motiva es uno muy específico y que de seguro ustedes entenderán.
En Nueva York hay una población de dominicanos que ronda el millón y medio; y si se contempla el área de la costa nordeste, probablemente estemos hablando del doble. A los locales consulares de la Gran Manzana, asisten diariamente sobre 600 personas en búsqueda de algún servicio o información. De hecho, no hay un consulado mas activo que el nuestro en toda el área tri estatal de NY; y eso es así desde hace por lo menos 20 años, cuando éramos a penas, la mitad de los residentes que somos hoy.
Esta realidad nos obliga a buscar instalaciones mayores y más cómodas, si es que queremos tratar a nuestra comunidad del exterior, como exigen los estándares de servicio en las áreas diplomáticas, comerciales y consulares hoy. En realidad, el Consulado en NYC es la puerta de entrada principal a República Dominicana, junto a nuestra Embajada en Washington. Pero es además, nuestra principal conexión con la laboriosa comunidad de residentes en ultramar.
Todo lo que deseo en esta primera entrega es llamar la atención de nuestro Gobierno a fin de que viabilice la compra de un local propio, donde se alojen no solo las oficinas dedicadas a los servicios diplomáticos, comerciales y consulares sino, que además, se instalen en dicho local las diferentes instituciones del estado dominicano que ofrecen algún tipo de los trámites oficiales que demanda la comunidad residente fuera del país.
Ya el Cónsul General Eligio Jáquez ha dado pasos concretos para cumplir con esa vieja promesa del gobierno nacional, ahora solo falta que la comunidad de dominicanos que vivimos en USA cerremos filas junto a nuestro cónsul, a fin de respaldarlo en este importantísimo empeño, que al lograrlo, será de gran beneficio para todos los nosotros y hasta para el propio estado dominicano.
En los próximos días abordaré el proyecto del Edificio Gubernamental Dominicano en Nueva York desde la óptica puramente económica, para apuntalar el mérito de su ejecución y conocer con detalles de cuánto dinero ha perdido el Estado por no haber realizado esta inversión a tiempo y cuánto dinero nos ahorraremos en los próximos 10 años solamente, si logramos que el gobierno respalde la iniciativa de nuestro Cónsul General en NY.
Para cerrar esta comunicación inicial, solo quiero presentarles un escenario a corto plazo que entiendo es del conocimiento de la mayoría de nosotros, pero que usualmente, no acostumbramos a tratar en público y mucho menos a conectarlo con nuestra presencia en estas tierras de oportunidades.
Hoy que las relaciones de Estados Unidos con América Latina están en proceso de ponerse a tono con la realidad geopolítica que impusieron la pandemia y la guerra de Ucrania, República Dominicana está en el deber de interpretar correctamente el rumbo que han de tomar dichas relaciones.
La necesidad de promover el “nearshoring” o sea, la fabricación más cercana a los puntos de distribución y consumo, debe ser de interés estratégico para los países del tercer mundo en América; y comenzar con modernizar la conexión comercial del socio mayoritario con nuestra representación en Nueva York, a través de la edificación del Edificio Gubernamental Dominicano, no es una idea descabellada, ya lo verán.
¡Vivimos, seguiremos disparando!