El fantasma de las lesiones zarandea a Eloy Jiménez y pone en jaque US$35 MM
Cuando Eloy Jiménez estuvo hábil para firmar (2013) fue la joya de la corona de su clase; prospecto número uno internacional de MLB y tomó el bono más alto (US$2,7 millones). Si bien Rafael Devers y Sandy Alcántara se les adelantaron en la llegada a la Tierra Prometida (2017), antes de debutar en la Gran Carpa ya tenía un contrato único para pelotero latinoamericano; US$43 millones garantizados por seis años.
Pero el jardinero que se estrenó ese 2019 con 31 cuadrangulares y al año siguiente ganara el Bate de Plata ha tropezado con las zancadillas de las lesiones, un fantasma que lo ha perseguido este lustro y que antes de completarse la primera semana de la campaña ya ha reaparecido.
En juego están US$35 millones repartidos en extensiones para 2025 y 2026, que en Chicago pueden ejercer o renunciar a ella en noviembre pagándole US$3 MM.
Jiménez, de 27 años, debió estar disponible para 708 partidos desde que los White Sox lo convirtieron en el dominicano 760 en llegar al Big Show.
Sin embargo, ha faltado a 272 encuentros, por lo que solo ha disputado un 61.5% de los choques del club, que lo adquirió desde los Cachorros ese 2017, en un paquete que también incluyó a Dylan Cease, por el zurdo colombiano José Quintana.
Una cadena de visitas al hospital que le generó un estrés tal y sentido de culpa que en un momento le hizo considerar el retiro, como dijo en una entrevista en Grandes en los Deportes en 2023, en enero pasado.
El domingo, el club lo colocó en lista de lesionados, en condición día a día y los pronósticos más optimistas dicen, en privado y voz baja, que podría regresar el fin de semana. Mientras corría a primera base sintió molestias en el aductor izquierdo y abandonó el partido ante los Tigres.
De acuerdo a Spotrac, un sitio especializado en contratos de atletas, Jiménez acumula 259 días de calendario en lista de lesionados donde ha cobrado US$6,6 millones.
El historial
Cuando los Cubs lo reclutaron ese verano de 2013 se trataba de un jugador de 6´4 y 198 libras.
«Mi sueño es ser un jugador de béisbol de Grandes Ligas, pero no quiero simplemente llegar allí», dijo Jiménez entonces a MLB.com. «Quiero ser uno de los mejores jugadores del juego y venir de la República Dominicana».
Pero fue en 2016 que llegó al Juego del Futuro y un año más tarde comenzó a aparecer entre los rankings de los mejores 100.
Sus problemas de salud comenzaron en 2017, en las ligas menores, con dos golpes en su hombro derecho que les costaron casi dos meses fuera. Un año más tarde estuvo de baja en cinco ocasiones, una de ella por 57 días a causa de una infección viral.
El mayor tropezón lo sufrió a principio de 2021, cuando mientras trataba de atrapar un elevado se rompió el pectoral izquierdo y requirió de una cirugía que lo sacó de juego por cuatro meses.
En 2022 tuvo que regresar al quirófano, entonces para reparar un tendón en su rodilla derecha.
Desde ese fichaje a la fecha subió hasta 250 libras y desde 2022 el equipo empezó a utilizarlo más como bateador designado.
Cuando baje el telón de la temporada en Chicago tendrán que considerar si ejercen la opción de US$16,5 millones para 2025 o si terminan la relación pagándole el buyout de US$3 MM. Si lo conservan, el club tiene otra de US$18,5 MM para 2026.