El Pentágono quiere lanzar un cohete térmico nuclear en 4 años
La Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA), el brazo de investigación y desarrollo del Pentágono, está financiando la construcción del primer sistema de propulsión térmica nuclear (NTP) del mundo para naves espaciales.
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El sistema, que se llama cohete de demostración para operaciones cislunares ágiles (DRACO), utiliza fisión nuclear en lugar del combustible de cohete tradicional, lo que lo convierte en un sistema de propulsión espacial más rápido y eficiente. La NASA ve al NTP como el sistema que podría llevar a los humanos a Marte y más allá.
A principios de esta semana, DARPA anunció que eligió a General Atomics, Blue Origin y Lockheed Martin para construir DRACO. El objetivo es enviar DRACO a la órbita terrestre baja en 2025.
NTP es un concepto que existe desde hace mucho tiempo. El Departamento de Energía (DOE) lo explica así:
Los sistemas NTP funcionan bombeando un propulsor líquido, probablemente hidrógeno, a través del núcleo del reactor. Los átomos de uranio se separan dentro del núcleo y liberan calor a través de la fisión. Este proceso físico calienta el propulsor y lo convierte en gas, que se expande a través de una boquilla para producir empuje.
El NTP es dos veces más eficiente que los cohetes químicos, debido al hecho de que los gases más ligeros (los diseños NTP suelen utilizar hidrógeno) son más fáciles de acelerar. Los cohetes químicos producen vapor de agua más pesado como subproducto de desecho.
Los científicos propusieron por primera vez el NTP en la década de 1940. En la década de 1960, la NASA y la Comisión de Energía Atómica habían investigado el uso de cohetes NTP con el programa Nuclear Engine for Rocket Vehicle Application (NERVA), pero cancelaron el proyecto antes de que los ingenieros pudieran construir un cohete funcional. Culpe a la inquietud por poner en órbita un reactor con uranio altamente enriquecido —o plutonio— ya la sensación de que los cohetes químicos eran lo suficientemente buenos para un programa espacial que se ralentizaba.