El plan ultrasecreto de Washington para matar a Kim Jong-Un de Corea del Norte
Esto es lo que debe recordar: aunque, según los informes, el plan no se centra en una guerra en toda regla sino en una guerra limitada, un ataque preventivo puede escalar de una pequeña escaramuza a una guerra a gran escala. Es difícil entender cómo las tropas coreanas jugarían un papel de liderazgo mientras que si comenzara una guerra, Corea no tendría control operativo militar.
El impredecible líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, tiene muchas formas de hacer la guerra a sus vecinos. Puede desatar comandos o armas cibernéticas, o amenazar con utilizar armas de destrucción masiva a menos que el mundo cumpla con sus deseos.
Si Kim Jong-un vivirá para ver los resultados es otro asunto.
Podría ser asesinado por las fuerzas especiales de Estados Unidos y Corea del Sur, o enterrado en su búnker por una bomba destructora de búnkeres. Otras bombas inteligentes podrían destruir sus puestos de mando e instalaciones nucleares. El estado autoritario de Corea del Norte podría convertirse en un estado sin autoridad, su liderazgo decapitado por ataques dirigidos con precisión.
O al menos ese parece ser el plan de Estados Unidos para luchar en la próxima Guerra de Corea. Y con Corea del Norte llevando a cabo una nueva ola de pruebas de misiles balísticos, y las fuerzas de Estados Unidos y Corea del Sur practicando cómo destruir los sitios nucleares de Corea del Norte, ese plan se está volviendo más relevante.
Se clasifica exactamente lo que implica el Plan de operaciones de EE. UU. 5015 (OPLAN 5015). Se han informado fragmentos en la prensa japonesa y surcoreana. Pero los detalles que han surgido indican que en 2015 se adoptó un nuevo enfoque hacia el viejo problema de cómo luchar contra una Corea del Norte belicosa y su enorme arsenal de armas convencionales y no convencionales.
Durante años, la expectativa había sido que una segunda Guerra de Corea se asemejaría a la primera, una guerra convencional de grandes unidades con las fuerzas estadounidenses y surcoreanas que primero detenían al enemigo y luego contraatacaban a Corea del Norte. Pero, según se informa, OPLAN 5015 adopta un enfoque más del siglo XXI de guerra limitada, fuerzas especiales y armas de precisión. El periódico japonés Asahi Shimbun informó en 2015 que el plan se parecía a una guerra de guerrillas, con asesinatos de fuerzas especiales y ataques selectivos a instalaciones clave. El objetivo era consolidar varios planes de guerra más antiguos, minimizar las bajas en una guerra e incluso prepararse para la posibilidad de que el régimen norcoreano colapsara.
Más importante aún, OPLAN 5015 previó la posibilidad de un ataque preventivo contra Corea del Norte.
“Se dijo que el nuevo plan se adaptaba a los cambios en el entorno de seguridad al centrarse en dar una respuesta militar más rápida y enérgica que el OPLAN 5027 anterior, incorporando el concepto de un ataque preventivo”, según Globalsecurity.org. Con las provocaciones localizadas de Corea del Norte cada vez más frecuentes, existía un riesgo creciente de escalada. OPLAN 5015 articuló formas de responder a estas amenazas con las fuerzas combinadas entre Estados Unidos y la República de Corea y, en caso de una escalada, para responder a la amenaza de los misiles y armas nucleares de Corea del Norte.