Eligio Jáquez y la difícil situación del PRM en Pennsylvania

Filadelfia, PA: El Partido Revolucionario Moderno (PRM) se encuentra en una difícil situación en la Seccional del sur de Nueva Jersey, Pennsylvania y Delaware. Es tan difícil, como poder entender que el presidente de ese partido, Nelson Filpo, tiene un origen fuertemente cuestionado, mediante una convención que nunca fue aceptada por el liderazgo del partido. Ahí mismo se originó una situación que todavía se refleja.

Para nadie es un secreto que en la Seccional de Pennsylvania, el predominio del liderazgo del expresidente Hipólito Mejía es una realidad. Todos los viejos robles del partido, esos dirigentes históricos, como Nelson Cuello, Daniel Crousett, Nilba Sánchez, Félix Sánchez, José Fortuna, Roque Iván Rondón, José Herrera Galán, José A. Paulino, Arturo Rojas y una enorme reserva de dirigentes importantes, que construyeron juntos a Peña Gómez la historia del antiguo PRD, para hacer posible el advenimiento de un PRM evolucionado. Con ellos a la cabeza, nunca perdieron unas elecciones en esa Seccional.

Para entender la crisis del PRM en Pennsylvania, primero es necesario tomar en cuenta el factor cuantitativo: Cuántos son y dónde están? Y, como para ser bruto no hay que estudiar, no será difícil acordar que Filadelfia es la capital política de esta Seccional. Nadie quiere decir esto, pero el PRM está indefectiblemente roto en esta demarcación, porque a los verdaderos líderes, los están excluyendo de las decisiones partidarias y de la participación en el gobierno. Óiganlo bien claro: está roto y necesita ser reparado urgentemente.

Sencillamente, eso es todo. Es que una minoría tiene subyugada a una mayoría y si la matemática sigue siendo una ciencia exacta, los resultados de esta ecuación dan explosión, rebeldía reprimida e insurrección.

Eligio Jáquez tiene conocimiento de causa de lo que aquí estoy afirmando. Él conoce a todos estos líderes históricos de la región, han sido sus aliados por décadas. Usted, señor Jáquez, en su condición de la máxima autoridad del gobierno en la región, por ser cónsul en Nueva York, póngase por encima del bien y del mal, de la verborrea y la politiquería barata, regrese a Filadelfia y siéntese con sus viejos aliados, dele el respeto que usted sabe que merecen, los espacios que con sus abnegaciones y trayectorias comprobadas se han ganado. Pase la página y detenga a tiempo una hemorragia política que el PRM podría pagar a un precio del que ya no le quede ni el menudo para devolver!