WASHINGTON (AP) — El Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso nuevas sanciones el jueves contra cuatro funcionarios ucranianos, incluidos dos miembros actuales del parlamento que, según funcionarios del gobierno, son parte de un esfuerzo de influencia rusa para establecer el pretexto para una mayor invasión de Ucrania.
Las sanciones nombran a los miembros del parlamento Taras Kozak y Oleh Voloshyn y dos ex funcionarios del gobierno. Según el Tesoro, los cuatro han estado íntimamente involucrados en los esfuerzos de desinformación del servicio de seguridad federal de Rusia, conocido como FSB.
El secretario de Estado Antony Blinken dijo que los cuatro hombres estaban en el centro de un esfuerzo del Kremlin que comenzó en 2020 “para degradar la capacidad del estado ucraniano para funcionar de manera independiente”.
Las nuevas sanciones se anunciaron menos de 24 horas después de que el presidente Joe Biden dijera que cree que Moscú invadirá Ucrania nuevamente. Advirtió al presidente ruso, Vladimir Putin, que su país pagaría un “caro alto” en vidas perdidas y una posible restricción en el acceso al sistema bancario mundial si lo hace.
Biden enfrentó críticas de republicanos y funcionarios ucranianos de que invitó a una invasión rusa limitada al sugerir en comentarios a los periodistas el miércoles que Estados Unidos reaccionaría con una respuesta mesurada si solo hubiera una “incursión menor”. Los funcionarios de la administración buscaron de inmediato aclarar sus comentarios, y el mismo Biden lo hizo el jueves.
“He sido absolutamente claro con el presidente Putin”, dijo Biden el jueves. “Él no tiene ningún malentendido: cualquier unidad rusa reunida cruza la frontera con Ucrania, eso es una invasión”.
Biden dijo el miércoles que su equipo está analizando posibles sanciones contra Moscú que apuntarían al sistema bancario ruso, restringiendo su capacidad “para negociar en dólares”. Biden se refería a limitar potencialmente el acceso de Rusia a la “compensación en dólares”: la conversión de pagos realizados por bancos en nombre de clientes a dólares estadounidenses desde rublos u otra moneda extranjera, según un alto funcionario de la administración que no estaba autorizado a comentar públicamente.
La senadora Jeanne Shaheen, una demócrata de New Hampshire que codirigió una delegación bipartidista del Congreso a Ucrania el fin de semana pasado, dijo a los periodistas el jueves que entendía que la administración aún estaba analizando cuál sería el impacto en otros países si se prohibiera a Rusia SWIFT, un sistema bancario. que maneja el flujo de dinero en todo el mundo.
La representante demócrata Elissa Slotkin de Michigan en una publicación de Twitter instó a la administración a tomar medidas para asegurarse de que los “oligarcas rusos que apoyan a Putin” no puedan “pasar sus fines de semana de compras en Mónaco y París”.
La Casa Blanca advirtió la semana pasada que Rusia ha estacionado agentes en Ucrania y sus alrededores posiblemente para crear un pretexto para una invasión. Los funcionarios estadounidenses y ucranianos también se han preocupado por el uso de armas rusas de la desinformación.
“Estados Unidos está tomando medidas para exponer y contrarrestar la peligrosa y amenazante campaña de influencia y desinformación de Rusia en Ucrania”, dijo el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, en un comunicado. “Estamos comprometidos a tomar medidas para responsabilizar a Rusia por sus acciones desestabilizadoras”.
Kozak, que controla varios canales de noticias en Ucrania, está acusado de amplificar narrativas falsas sobre el círculo íntimo del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy y las elecciones de 2020. Voloshyn ha trabajado con el FSB de Rusia para socavar a los funcionarios del gobierno ucraniano, dice el Tesoro.
Los funcionarios del Tesoro dicen que Voloshyn también trabajó con Konstantin Kilimnik, un ciudadano ruso que fue sancionado anteriormente por supuestamente intentar influir en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016 y pasar información a la inteligencia rusa.
El Tesoro también sancionó al exsecretario adjunto de seguridad nacional y consejos de defensa de Ucrania, Vladimir Sivkovich. La administración dice que Sivkovich trabajó el año pasado con una red de activistas de inteligencia rusos para llevar a cabo operaciones de influencia que intentaron generar apoyo para que Ucrania cediera oficialmente Crimea a Rusia a cambio de una reducción de las fuerzas respaldadas por Rusia. Las tropas rusas se apoderaron de Crimea en 2014 y luego Rusia anexó la península del Mar Negro.
El otro exfuncionario citado es Volodymyr Oliynyk, quien, según el Tesoro, trabajó bajo la dirección del FSB para recopilar información sobre la infraestructura crítica de Ucrania. Oliynk vive actualmente en Rusia, según el Tesoro.
Biden señaló el jueves que Rusia “tiene un largo historial de uso de medidas distintas a la acción militar abierta para llevar a cabo la agresión”.
Después de sus especulaciones sobre una “incursión menor” de Rusia, Biden subrayó que cualquier invasión sería vista como una violación de la soberanía de Ucrania y tendría graves consecuencias para Rusia. Sin embargo, sus comentarios sacudieron a Kiev.
