Francisco Mejía tiene en Tampa una nueva oportunidad de acercarse a los vaticinios
Port Charlotte, Florida. Francisco Mejía llega a los Rays de Tampa con una cruz algo pesada.
Los cazatalentos y los oficiales del equipo comentan que su conducción del juego y su defensa necesitan mejorar, su bate ha sido decepcionante y su promesa como el mejor prospecto receptor del béisbol hace unos años se está desvaneciendo rápidamente.
Mejía parece muy consciente de eso.
“He tenido muchas oportunidades. Ahora es el momento de capitalizar y aprovechar este tipo de oportunidades “, dijo el dominicano al periódico Tampa Bay Times en una llamada de Zoom con los medios después del quinto entrenamiento de primavera de los Rays en Port Charlotte, Florida. “Creo que todavía tengo mucho más en el tanque. Entonces era un buen jugador, pero creo que todavía tengo muchas oportunidades y mucho espacio para seguir creciendo y convertirme en un mejor jugador”.
Mejía pertenece a las Estrellas Orientales en la Liga de Béisbol Profesional de República Dominicana.
Los Rays consiguieron a Mejía, de 25 años, procedente de los Padres de San Diego y a otros tres lanzadores como parte de acuerdo por del zurdo Blake Snell.
Mientras que el derecho Luis Patiño es considerado la pieza premiada y el prospecto de pitcheo Cole Wilcox y el receptor Blake Hunt potenciales encajes futuros, Mejía tiene la oportunidad de tener el impacto más inmediato.
Como un bateador ambidiestro que es mejor a la zurda, Mejía podría emparejarse bien con el bateador derecho Mike Zunino, el veterano receptor orientado a la defensa que fue contratado de regreso, para dar a los Rays, por lo general desafiados por la receptoría, un tándem sólido detrás del plato.
Tan decepcionante como Mejía estuvo en las limitadas oportunidades con los Indios de Cleveland, con los que llegó a los 21 años; y con los Padres, que lo consiguieron en un canje en julio de 2018, los Rays, naturalmente, creen que puede hacerlo mejor con ellos.
Creen que su cuerpo técnico, específicamente los especialistas en defensa Paul Hoover y Tomas Francisco, pueden llegar a Mejía con una nueva perspectiva y un mensaje diferente y que su swing se traducirá en más del promedio de .225 y OPS de .668 que tuvo en 128 juegos en partes de cuatro temporadas de Grandes Ligas.