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¿Hombre que se prendió fuego frente a tribunal  donde juzgan a Trump  habló a los políticos?

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Nueva York: Si algo logró Max Azzarello, el hombre que viajó desde Florida hasta Manhattan para prenderse fuego frente a la puerta del tribunal donde se le sigue un proceso judicial al expresidente Donald Trump, quien estaba presente en el edificio en ese momento. Max había desencadenado una serie de protestas contra los políticos en Florida que lo habían llevado varias veces a la cárcel.

El periplo de Max Azzarello de 37 años estaba profundamente marcado por su evidente desacuerdo con el establishment, tanto demócratas como republicanos. Es posible que estuviera afectado por algún tipo de trastorno; pero el problema es que hay millones de estadounidenses en contra de lo que están haciendo nuestros políticos. Al menos a Max hay que darle el reconocimiento póstumo, porque no pudo haber elegido otro mejor escenario, al menos para llamar la atención sobre su lucha y su protesta.

 

Inmediatamente los estrategas políticos del mismo Trump parecen haberle aconsejado el silencio sobre el particular,  porque obviamente,  sería el primer político al que el dedo acusador de la opinión pública se dirigiría. Es que los políticos saben muy bien cuándo elegir el silencio como respuesta.

El pueblo estadounidense cree merecer algo mejor de lo que los partidos políticos le han impuesto como “opciones obligadas”: Un Donald Trump que fue echado de la Casa Blanca hace apenas menos de 4 años; y un Biden que parece más bien merecer y un retiro.

Max Azzarello

Antes de inmolarse vertiendo un combustible sobre su cuerpo y prenderse en llamas,  Max Azzarello lanzó una gran cantidad de panfletos al aire que incluía un enlace a un boletín de Substack.

“Este acto extremo de protesta es para llamar la atención sobre un descubrimiento urgente e importante: somos víctimas de una estafa totalitaria, y nuestro propio gobierno (junto con muchos de sus aliados) está a punto de golpearnos con un golpe mundial fascista apocalíptico”, expresa uno de los panfletos de Max.

Siete de cada diez adultos estadounidenses tienen dudas sobre la capacidad mental de Biden y Trump.

Tanto los republicanos como los demócratas enfrentan dificultades internas. Por un lado, los demócratas están conscientes de que Biden no se encuentra en las mejores condiciones para representar la reelección y que se ha puesto en duda su capacidad mental para continuar como presidente.

Los republicanos son conscientes de que Trump enfrenta dificultades similares, pero han perdido el control de su propio partido, el que ha pasado a ser un sentimiento pro-Trump, razón por la que está siendo impuesto como su candidato.

Según una encuesta, una gran cantidad de adultos estadounidenses tienen dudas sobre las habilidades mentales del presidente Joe Biden, de 81 años, y del favorito republicano Donald Trump, de 77 años, en lo que podría ser una revancha de las elecciones de 2020.

Por eso Biden convirtió el discurso sobre el Estado de la Unión en una especie de audición en tiempo real para un segundo mandato.  Más de 6 de cada 10 (63%) dicen que no tienen mucha o ninguna confianza en la capacidad mental de Biden para servir eficazmente como presidente. Una proporción similar, aunque algo menor (57%), afirma que Trump carece de la memoria y la agudeza necesarias para desempeñarse en el cargo.

La encuesta reciente de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research indica que las próximas elecciones presidenciales podrían ser un desafío en el que factores como la edad y la habilidad mental podrían ser más importantes que cualquier otra batalla política en la era actual.

 ¿Qué plantea este escenario?

 Si en estos momentos hicieran una encuesta preguntando ¿Por quién votaría usted? Biden, Trump o Nadie; de seguro ganaría por mucho el NADIE.

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