Johnson se esfuerza por recuperar la autoridad después de la rebelión
LONDRES (AP) — El primer ministro británico, Boris Johnson, se reunía con su gabinete el martes e intentaba recomponer su autoridad hecha jirones después de sobrevivir a una moción de censura que lo ha dejado como un líder gravemente debilitado.
Johnson prometió “seguir con el trabajo” y concentrarse en “lo que le importa al pueblo británico”, definido como la economía, la atención médica y el crimen, después de que los legisladores del Partido Conservador votaron por 211 a 148 para apoyarlo como líder.
Johnson necesitaba el respaldo de 180 de los 359 legisladores conservadores en la votación secreta del lunes para permanecer en el poder. Obtuvo más que eso, pero aunque describió la victoria como «convincente», la rebelión fue más grande de lo que algunos de sus seguidores habían pronosticado. También fue un margen más estrecho que el que obtuvo la predecesora de Johnson, Theresa May, en una moción de censura de 2018. Se vio obligada a dimitir seis meses después.
Según las reglas del partido, Johnson ahora está libre de otro desafío por un año. Pero los primeros ministros anteriores que se han enfrentado a votos de censura, incluidos May y Margaret Thatcher, han sufrido daños terminales.
La rebelión fue una señal de profundas divisiones entre los conservadores, menos de tres años después de que Johnson llevara al partido a su mayor victoria electoral en décadas. La mayoría de los periódicos británicos tenían pocas dudas de que eran malas noticias para Johnson. El Daily Telegraph, que apoya a los conservadores, dijo: «La victoria hueca destroza a los conservadores», mientras que el Daily Mirror, de tendencia izquierdista, dijo sin rodeos: «Se acabó la fiesta, Boris».
La votación siguió a meses de creciente descontento por la ética y el juicio del primer ministro que se centró en las revelaciones de partidos infractores de la ley en la oficina del primer ministro cuando Gran Bretaña estaba encerrada durante la pandemia de coronavirus.
El exlíder conservador William Hague dijo que “si bien Johnson ha sobrevivido a la noche, el daño causado a su cargo de primer ministro es grave” y debería renunciar.
“Se han dicho palabras que no se pueden retractar, se han publicado informes que no se pueden borrar y se han emitido votos que muestran un mayor nivel de rechazo que el que cualquier líder tory ha soportado y sobrevivido”, escribió Hague en el Times de Londres.