La duplicación de aranceles de Trump afecta a India y daña la relación con EE. UU.

(Reuters) La duplicación de los aranceles a las importaciones procedentes de India, anunciada por el presidente estadounidense Donald Trump hasta el 50%, entró en vigor el miércoles, tal como estaba previsto, lo que supone un duro golpe para las relaciones entre ambos países, que se convirtieron en socios estratégicos a principios de este siglo.
Un arancel punitivo del 25% impuesto debido a las compras de petróleo ruso por parte de India se suma al arancel previo del 25% impuesto por Trump sobre muchas importaciones procedentes del país del sur de Asia. Esto eleva los aranceles totales hasta el 50% para productos como prendas de vestir, gemas y joyas, calzado, artículos deportivos, muebles y productos químicos, entre los más altos impuestos por EE. EE. UU. y comparables a los de Brasil y China.

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Los nuevos aranceles amenazan a miles de pequeños exportadores y empleos, incluso en Gujarat, el estado natal del primer ministro Narendra Modi, y se espera que perjudiquen el crecimiento de la principal economía de más rápido crecimiento del mundo.
El miércoles no hubo reacción del mercado interno a la medida, ya que las bolsas permanecieron cerradas por un festival hindú. Sin embargo, los índices de referencia bursátiles registraron su peor sesión en tres meses el martes, después de que una notificación de Washington confirmara el arancel adicional.
La rupia india también continuó su racha de pérdidas por quinta sesión consecutiva el martes, cerrando en su nivel más bajo en tres semanas.
Si bien la interrupción arancelaria sería contundente, podría no ser todo pesimismo para la quinta economía más grande del mundo si Nueva Delhi logra seguir reformando su economía y ser menos proteccionista mientras busca resolver la crisis con Washington, según los analistas.
El Ministerio de Comercio de la India no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el miércoles. Sin embargo, un funcionario del Ministerio de Comercio, que habló bajo condición de anonimato, afirmó que los exportadores afectados por los aranceles recibirían asistencia financiera y se les animaría a diversificar sus operaciones hacia mercados como China, Latinoamérica y Oriente Medio.
Un aviso de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. EE. UU. (abre una nueva pestaña) a los transportistas ofrece una exención de tres semanas para las mercancías indias que se hayan embarcado y estén en tránsito hacia EE. EE. UU. antes de la medianoche.
También están exentos el acero, el aluminio y sus productos derivados, los vehículos de pasajeros, el cobre y otros bienes sujetos a aranceles separados de hasta el 50 % en virtud de la Sección 232 de la ley de comercio y seguridad nacional.
Funcionarios del Ministerio de Comercio de la India afirman que el arancel promedio sobre las importaciones estadounidenses ronda el 7,5 %, mientras que la oficina del Representante Comercial de EE. EE. UU. ha destacado tasas de hasta el 100 % para los automóviles y una tasa arancelaria promedio aplicada del 39 % para los productos agrícolas estadounidenses.

Conversaciones fallidas

A medida que se acercaba la medianoche, las autoridades estadounidenses no ofrecieron ninguna esperanza a India de evitar los aranceles. La medida arancelaria del miércoles se produce tras cinco rondas de negociaciones fallidas, durante las cuales funcionarios indios se mostraron optimistas respecto a la posibilidad de limitar los aranceles estadounidenses al 15%, la tasa concedida a los productos de otros socios comerciales importantes de Estados Unidos, como Japón, Corea del Sur y la Unión Europea.
Funcionarios de ambas partes atribuyeron el fracaso de las negociaciones a errores de cálculo políticos y señales desatendidas. Su comercio bilateral de bienes ascendió a 129.000 millones de dólares en 2024, con un déficit comercial estadounidense de 45.800 millones de dólares, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos.
Washington afirma que la compra de petróleo ruso por parte de India contribuye a financiar la guerra de Moscú en Ucrania y que Nueva Delhi también se beneficia de ello. India ha rechazado la acusación, calificándola de doble moral, señalando los vínculos comerciales de Estados Unidos y Europa con Rusia.

Las asociaciones de exportadores estiman que los aranceles podrían afectar a casi el 55% de los 87.000 millones de dólares en exportaciones de mercancías de la India a Estados Unidos, beneficiando a competidores como Vietnam, Bangladesh y China.
Rajeswari Sengupta, profesora de economía del Instituto Indira Gandhi de Investigación para el Desarrollo de Bombay, afirmó que permitir la depreciación de la rupia es una forma de brindar apoyo indirecto a los exportadores y recuperar la competitividad perdida.

“El gobierno debería adoptar una estrategia más orientada al comercio y menos proteccionista para impulsar la demanda, que ya está decayendo”, declaró.
S.C. Ralhan, presidente de la Federación de Organizaciones de Exportación de la India, señaló que el gobierno debería considerar una moratoria de un año sobre los préstamos bancarios para los exportadores afectados, además de otorgar crédito de bajo costo y facilitar la obtención de préstamos.

Unos aranceles sostenidos a este ritmo podrían mermar el creciente atractivo de la India como centro de fabricación alternativo a China para productos como teléfonos inteligentes y productos electrónicos. “Hasta 2 millones de empleos están en riesgo a corto plazo”, afirmó Sujan Hajra, economista jefe del Grupo Anand Rathi.

“Sin embargo, el panorama general es menos sombrío: la base exportadora de la India está diversificada, sus ganancias corporativas y perspectivas de inflación se mantienen intactas, y la demanda interna es lo suficientemente robusta como para amortiguar el impacto”, añadió.

El enfrentamiento entre Estados Unidos e India ha planteado interrogantes sobre la relación general entre ambos países, importantes socios en materia de seguridad que comparten la preocupación por China.