La falsa heredera Anna Sorokin sale de prisión, pero le prohíben usar redes sociales
Anna Sorokin o Anna Delvey, la estafadora de 31 años que se hizo pasar por una millonaria heredera, logra salir de la cárcel, pero se le prohibirá el uso de todas las formas de redes sociales, según un juez de migración consultado por medios estadounidenses este miércoles.
Sorokin logró la liberación de la cárcel del condado de Orange donde estuvo recluida los últimos 17 meses mientras lucha por no ser deportada.
El diario The New York Post indica que la joven, cuya vida fue adaptada a una serie por Netflix, sería liberada este jueves si logra demostrar que tiene un lugar donde quedarse, sin embargo, deberá permanecer bajo arresto domiciliario las 24 horas con monitoreo electrónico, así como pagar una fianza de 10,000 dólares.
La orden del juez también prohíbe el acceso de Anna a cualquier plataforma de redes sociales, en las que incluyen a Twitter, Facebook, TikTok e Instagram, en esta última la reconocida estafadora cuenta con un millón de seguidores.
Anna Sorokin cumplió cuatro años en prisión tras recibir su condena en 2019 por una serie de cargos estatales relacionados con sus estafas a la alta sociedad de Nueva York, que incluyen hospedaje en hoteles y facturas en restaurantes de lujo que nunca pagó.
En 2021 fue liberada por su buen comportamiento, pero los agentes del sistema de inmigración volvieron a arrestarla y desde entonces permanece bajo su supervisión en una instalación en el condado de Orange.
El gobierno entiende que Anna Sorokin debería permanecer en prisión ante la amenaza que representa para la sociedad, mientras su defensa agradeció la decisión del tribunal de liberarla.
«El juez reconoció legítimamente que Anna no es un peligro para la comunidad. Si bien todavía hay algunos obstáculos que superar en sus condiciones de liberación, Anna está encantada de salir para poder concentrarse en apelar su condena injusta», dijo su abogado Duncan Levin.
Anna Sorokin había publicado una carta en The Daily Mail en la criticaba el sistema de inmigración de los Estados Unidos y argumentó que su «encarcelamiento simplemente no tiene sentido», reza el documento compartido el mes pasado.