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La investigación policial de Minneapolis del Departamento de Justicia de Biden señala el regreso a la cruzada de la era Obama por la reforma policial

"Los decretos de consentimiento fueron un método común para buscar la reforma policial bajo la administración de Obama".
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La nueva investigación del Departamento de Justicia sobre el Departamento de Policía de Minneapolis analizará las prácticas en curso y examinará posibles violaciones legales, que recuerdan las investigaciones pasadas bajo la administración de Obama.

El fiscal general Merrick Garland anunció la investigación el miércoles a raíz de la condena por asesinato de Derek Chauvin por la muerte de George Floyd. Mencionó posibles remedios que se han utilizado en casos anteriores relacionados con Baltimore y Ferguson, Missouri.

“Por lo general, cuando el Departamento de Justicia encuentra prácticas ilegales o patrones de prácticas, el departamento de policía local entra en un acuerdo de conciliación o un decreto de consentimiento para garantizar que se tomen medidas rápidas y efectivas para alinear las prácticas policiales con la ley”, dijo Garland.

El decreto de consentimiento de Baltimore, celebrado por la ciudad en abril de 2017 tras la muerte de Freddie Gray, pedía cambios que incluían la institución de un grupo de trabajo de supervisión comunitaria, capacitación anual obligatoria para la vigilancia comunitaria y vigilancia policial “orientada a problemas”, nuevas políticas con respecto a las paradas , registros, arrestos, uso de la fuerza y ​​transporte de personas detenidas.
Gray murió después de que lo transportaran en un vehículo policial sin abrocharse el cinturón. Ninguno de los seis oficiales involucrados fue condenado, y cuatro de ellos llevaron sus casos a juicio. En septiembre de 2017, el DOJ anunció que su propia investigación arrojó pruebas insuficientes para respaldar los cargos federales de derechos civiles contra cualquiera de ellos.
El decreto de consentimiento de Ferguson, que se firmó luego de la muerte de Michael Brown en agosto de 2014, también exigió nuevas medidas relacionadas con la vigilancia comunitaria, el uso de la fuerza, detenciones, registros e incautaciones, cámaras corporales y de automóviles, capacitación y más.

Brown murió después de que un oficial, Darren Wilson, le disparara durante un altercado. En noviembre de 2014, un gran jurado decidió no acusar a Wilson, y un informe del Departamento de Justicia de marzo de 2015 declaró “que la evidencia no respalda la acusación de una violación de la ley federal”.

Los decretos de consentimiento ya no eran la herramienta elegida bajo la administración Trump, y el entonces fiscal general Jeff Sessions emitió un memorando en noviembre de 2018 para limitar su uso.

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