Llegó la hora cero para la presidencial y una lucha a muerte por el control del Congreso
Nueva York: El 5 de noviembre de 2024, se llevarán a cabo unas elecciones consideradas de gran importancia para el sistema político de Estados Unidos, en las que se renovará la totalidad de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado. En realidad, el pueblo estadounidense enfrenta un margen muy precario para decidir entre dos candidatos, el “menos malo”. Afortunadamente, ambos tienen visiones y enfoques muy diferentes sobre diversos temas que impactarán significativamente la vida de los ciudadanos.
Economía
Kamala Harris aboga por un enfoque progresista, centrándose en la justicia económica, el aumento del salario mínimo, la expansión del acceso a la atención médica y la promoción de una educación asequible. Propone impuestos más altos para los más ricos con el fin de financiar programas sociales. En cambio, Donald Trump promueve políticas económicas más conservadoras, enfatizando recortes de impuestos y desregulación como medios para estimular el crecimiento económico, con un enfoque en beneficiar a las empresas para impulsar el empleo.
Salud
Harris defiende la expansión del acceso a la atención médica, apoyando la cobertura universal y el acceso a servicios de salud asequibles, frecuentemente promoviendo la idea de “Medicare para todos”. Trump, por su parte, ha intentado derogar la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio (Obamacare) y propone un sistema que favorece el mercado privado, con menor intervención del gobierno.
Cambio Climático
Harris considera el cambio climático una crisis urgente y apoya políticas para reducir las emisiones de carbono y promover energías renovables, incluyendo un “Green New Deal” para abordar estas cuestiones. Trump ha minimizado la importancia del cambio climático, favoreciendo la expansión de la industria de combustibles fósiles y retirando a EE.UU. de acuerdos internacionales como el Acuerdo de París.
Inmigración
Harris promueve una reforma integral de inmigración que incluya un camino a la ciudadanía para los soñadores y una política más humanitaria hacia los inmigrantes. Trump adopta una postura más dura, enfocándose en la construcción de un muro en la frontera y en la implementación de políticas restrictivas de inmigración.
Derechos Civiles y Justicia Social
Harris se centra en la equidad racial, la reforma policial y los derechos LGBTQ+, apoyando políticas que buscan abordar las disparidades sociales y económicas. Trump ha sido criticado por sus políticas y retórica en temas de raza, derechos civiles y la comunidad LGBTQ+, a menudo adoptando una postura más conservadora en estos asuntos.
Estas diferencias no solo reflejan sus políticas, sino también sus visiones sobre el papel del gobierno en la vida de los ciudadanos y la dirección que debería tomar el país.
469 escaños en juego en el Congreso
Los mismos temas que han polarizado las elecciones presidenciales se han convertido en un verdadero campo de batalla en las elecciones congresuales. 435 miembros de la Cámara de Representantes están en juego, además de un tercio del Senado (34 senadores), junto con algunas elecciones de gobernadores y estatales para renovar los congresos locales.
Se teme que las propuestas presidenciales polarizadas sobre economía, salud, cambio climático, inmigración, derechos civiles y la comunidad LGBTQ+ arrastren o se lleven de paro muchos escaños, provocando la salida de numerosos legisladores del Congreso el martes.
El resultado de las elecciones dará forma al futuro del país y determinará si la nueva Casa Blanca tiene aliados o escépticos en el Capitolio, o si se enfrenta a un Congreso dividido, como ha sido el caso en la última sesión, donde el Partido Republicano cuenta con una mayoría estrecha en la Cámara de Representantes, mientras que el Senado está bajo control demócrata.