Luis Abinader refuerza la lucha contra la corrupción con un nuevo decreto
El presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, firmó recientemente el decreto 76-25, una medida destinada a fortalecer la lucha contra la corrupción en la administración pública. Esta decisión se produce en un contexto donde han surgido numerosas denuncias de irregularidades en varias provincias del país, lo que ha llevado al mandatario a tomar acciones concretas para abordar este problema.
El decreto establece la creación de la Comisión Presidencial de Transparencia y Anticorrupción, un organismo que tendrá como principal responsabilidad supervisar y promover la transparencia en la gestión pública, así como investigar las denuncias presentadas. Si bien Abinader no especificó las provincias involucradas en las denuncias de corrupción, sí confirmó que se han recibido un total de 47 denuncias en el Ministerio Público y que 426 informes han sido enviados al Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA).
Ante la gravedad de la situación, el presidente Abinader ha enfatizado la necesidad de tomar medidas enérgicas. En este sentido, se ha informado que se han cancelado 108 procesos en el área de Compras y Contrataciones, lo que sugiere un compromiso por parte del gobierno para limpiar la administración pública de prácticas corruptas.
La creación de esta nueva comisión representa un paso significativo en el esfuerzo del gobierno dominicano por construir una sociedad más justa y equitativa, donde los ciudadanos confíen en que sus recursos están siendo utilizados de manera adecuada. La expectativa del presidente es que esta acción no solo sirva para atender los casos ya denunciados, sino que también establezca un marco de actuación para evitar futuros actos de corrupción.
La reacción de la ciudadanía y de diversos sectores de la sociedad es hoy crucial. Muchos esperan que la creación de esta Comisión Presidencial de Transparencia y Anticorrupción sea el inicio de un proceso real hacia la rendición de cuentas y la transparencia en el manejo de los recursos públicos. El presidente Abinader se encuentra en una posición donde la presión social es alta, y su administración está bajo la mirada atenta de la población, que anhela mejoras palpables en el combate contra la corrupción.
