Mujer vive en una parada de la OMSA
Una parada de la OMSA se ha convertido en el refugio de una mujer de edad avanzada con aparentes trastornos mentales.
Quienes frecuentan la zona aseguran que la señora ocupó la instalación a inicios de la pandemia, en el año 2020. La misma está ubicada en la autopista San Isidro, frente a un reconocido supermercado, próximo al residencial Italia.
Para los transeúntes y comerciantes del lugar, se trata de una indigente. Sin embargo, ella sostiene que su permanencia en este espacio público obedece a un mandato divino de predicar el evangelio.
La incoherencia respecto a su domicilio expresada en una corta conversación con un equipo de elCaribe, evidencia un trastorno psiquiátrico.
Espacio público
Dice responder al nombre de Isabel de los Santos y ser una consagrada evangelista de una iglesia adventista. Afirma sentirse cómoda en el limitado espacio cargado de bultos apiñados y cubiertos con fundas plásticas, aseguradas con sogas. De acuerdo con motoconchistas de la zona, la mujer llega a tempranas horas, organiza su espacio, cepilla sus dientes y sale a caminar.
“Ella se la pasa caminando por el Hospital Darío Contreras y no habla con nosotros”, expresa a este medio un joven motociclista.
Cuentan que en varias ocasiones, la anciana fue desalojada de la parada de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA), pero vuelve a ocuparla. Conforme a los que hacen vida en el lugar, la señora se sostiene por las dádivas de personas e instituciones sociales.
Temen por su seguridad
Preocupados por su estado de vulnerabilidad, quienes conocen de su situación hicieron un llamado a las instituciones de protección a los derechos de los envejecientes, a los fines de socorrerla, ofrecerle un hogar seguro y la asistencia médica.
Es frecuente encontrar en las calles de Santo Domingo, adultos mayores con problemas de salud mental. Estos se exponen al riesgo de ser abusados o maltratados por desaprensivos.