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Nuevo estudio replantea casi todo sobre cáncer de próstata

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En muchos centros médicos de todo el mundo se están realizando investigaciones sobre las causas, la prevención, la detección, las pruebas y el tratamiento del cáncer de próstata que están cambiando todos los paradigmas sobre esa dolencia exclusiva de los hombres y plantean el fracaso de los métodos usados por la ciencia hasta el momento. Es como que hay que empezar todo casi desde cero, según publicó American Cancer Society.

Genética

Una nueva investigación sobre los cambios genéticos relacionados con el cáncer de próstata está ayudando a los científicos a comprender mejor cómo se desarrolla el cáncer de próstata. Esto podría hacer posible diseñar medicamentos para abordar esos cambios.

Las pruebas de genes anormales del cáncer de próstata también podrían ayudar a identificar a los hombres con alto riesgo que podrían beneficiarse de las pruebas de detección o de los ensayos clínicos de quimioprevención, que usan medicamentos para tratar de evitar que desarrollen cáncer.

En los hombres a los que ya se les ha diagnosticado cáncer de próstata, las pruebas de ciertos cambios genéticos pueden darles a los hombres y a sus médicos una mejor idea de la probabilidad de que el cáncer crezca y se propague, lo que podría influir en las opciones de tratamiento (consulte a continuación).

Prevención

Según los últimos estudios, parecería que hoy sabemos mucho menos de lo que creíamos sobre esta enfermedad y el fracaso de los tratamientos quirúrgicos hace que los científicos hayan llegado a un punto de inflexión como descubrir que las creencias han estado equivocadas y se necesita desarrollar otros métodos. Por ejemplo, se ha determinado que, de cada cinco pacientes operados de próstata, cuatro han padecido de efectos postoperatorios severos, como tener que usar pañales o impotencia sexual. Solo uno pudo superar por completo y sin complicaciones la cirugía, lo que constituye obliga a la ciencia a replantearse por completo los paradigmas quirúrgicos.

Los investigadores continúan buscando alimentos (o sustancias en ellos) que puedan ayudar a reducir el riesgo de cáncer de próstata. Los científicos han encontrado algunas sustancias en los tomates (licopenos) y la soja (isoflavonas) que podrían ayudar a prevenir algunos tipos de cáncer de próstata. Los estudios ahora están analizando los posibles efectos de estos compuestos más de cerca.

 También están tratando de desarrollar compuestos relacionados que sean aún más potentes y puedan usarse como suplementos dietéticos. Pero hasta ahora, la mayoría de las investigaciones sugieren que una dieta balanceada que incluya estos alimentos, así como otras frutas y verduras, es probablemente más beneficiosa que tomar sustancias específicas como suplementos dietéticos.

Una vitamina que puede ser importante en la prevención es la vitamina D. Algunos estudios han encontrado que los hombres con altos niveles de vitamina D parecen tener un menor riesgo de desarrollar las formas más letales de cáncer de próstata. Sin embargo, en general, los estudios no han encontrado que la vitamina D proteja contra el cáncer de próstata.

Algunas investigaciones han sugerido que los hombres que toman ciertos medicamentos regularmente (como aspirina o estatinas para reducir el colesterol) durante mucho tiempo pueden tener un menor riesgo de contraer o morir de cáncer de próstata. Aun así, se necesita más investigación para confirmar esto y para confirmar que cualquier beneficio supera los riesgos potenciales.

Los científicos también han probado ciertos medicamentos hormonales llamados inhibidores de la 5-alfa reductasa como una forma de reducir el riesgo de cáncer de próstata. Esto se analiza en ¿Se puede prevenir el cáncer de próstata?

Fracaso de la detección temprana

Los médicos están de acuerdo en que el análisis de prueba rectal y  de sangre del antígeno prostático específico (PSA, por sus siglas en inglés) no son una prueba perfecta para detectar el cáncer de próstata a tiempo. No detecta algunos tipos de cáncer y, a veces, encuentra cánceres que probablemente nunca necesiten tratamiento. Los investigadores están trabajando en estrategias para abordar estos problemas. Lo que supone nuevos retos de cambios radicales en la metodología de detección temprana. Esto lo cambia todo porque plantea un nuevo enfoque que trate de mejorar la prueba que mide el nivel total de PSA, como se describe en pruebas de detección del cáncer de próstata.

Esto significa que hay que desarrollar nuevas pruebas basadas en otras formas de PSA u otros marcadores tumorales. Varias pruebas más nuevas parecen ser más precisas que la prueba de PSA, entre ellas: El índice de salud de la próstata (PHI, por sus siglas en inglés), que combina los resultados del PSA total, el PSA libre y el proPSA para ayudar a determinar la probabilidad de que un hombre tenga cáncer de próstata que pueda necesitar tratamiento. La prueba 4Kscore, que combina los resultados de PSA total, PSA libre, PSA intacto y calicreína humana 2 (hK2), junto con algunos otros factores, para ayudar a determinar la probabilidad de que un hombre tenga cáncer de próstata que podría necesitar tratamiento. Eso plantea, en otras palabras, que las cosas no andan bien al respecto, basado en la metodología actual.

Pruebas (como Progensa) que analizan el nivel del antígeno 3 del cáncer de próstata (PCA3) en la orina después de un examen rectal digital (DRE). El DRE empuja algunas de las células de la próstata hacia la orina. Cuanto más alto sea el nivel, más probable es que haya cáncer de próstata.

Pruebas que buscan un cambio genético anormal llamado TMPRSS2:ERG en las células de la próstata en la orina recolectada después de un DRE. Este cambio genético se encuentra en algunos cánceres de próstata, pero rara vez se encuentra en las células de hombres sin cáncer de próstata.

ExoDx Prostate (IntelliScore), o EPI, una prueba que analiza los niveles de 3 biomarcadores en una muestra de orina para ayudar a determinar el riesgo de un hombre de tener cáncer de próstata agresivo (de alto grado).

ConfirmMDx, que es una prueba que analiza ciertos genes en las células de una muestra de biopsia de próstata.

No es probable que estas pruebas reemplacen la prueba de PSA en el corto plazo, pero pueden ser útiles en ciertas situaciones. Por ejemplo, algunas de estas pruebas pueden ser útiles en hombres con un PSA ligeramente elevado, para ayudar a determinar si deben someterse a una biopsia de próstata. Algunas de estas pruebas pueden ser más útiles para determinar si los hombres que ya se han sometido a una biopsia de próstata que no encontró cáncer deben someterse a otra biopsia. Los médicos e investigadores están tratando de determinar la mejor manera de usar cada una de estas pruebas.

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