Presidente Luis Abinader invoca solidaridad frente a desafíos de RD por inflación global, inseguridad y crisis haitiana
Los Ángeles.- El presidente dominicano Luis Abinader resaltó los logros alcanzados por República Dominicana en su lucha contra el COVID-19, la recuperación y el crecimiento económico y el enfrentamiento al narcotráfico; sin embargo, reclamó hoy en su discurso en la Cumbre de las Américas, solidaridad con el país frente a tres desafíos que amenazan los avances dominicanos en materia social, económica y de seguridad.
Especificó que la invasión rusa a Ucrania ha generado en nuestro país y otros países del Caribe, un impacto mayor a otros de la región, ya que no tenemos hidrocarburos y somos una economía muy abierta, que depende de las materias primas importadas. Es la primera vez que nuestro gobierno no cuenta con un país amigo que le ayuda a mitigar el shock petrolero.
El mandatario resaltó que en los años 80 con el Acuerdo de San José, de México y Venezuela, y después Petrocaribe de Venezuela hasta el 2014, con financiamiento y precios especiales, ayudaron a República Dominicana a mitigar las alzas del petróleo de esas épocas, mientras que hoy su país debe hacer un enorme sacrificio fiscal para subsidiar combustibles, fertilizantes y alimentos.
Esta realidad nos compele a buscar vías que garanticen nuestra seguridad energética y alimentaria. Urge adoptar medidas de abastecimiento que reconozcan que estamos en una “economía de guerra” flexibilizando las restricciones, así como buscar financiamiento en términos concesionarios que nos permitan, a los países de ingreso medio, enfrentar esta crisis, la más compleja del último siglo y que está haciendo estragos en la región, resumió.
Financiamientos blandos o concesiones
“Se hace urgente la creación de mecanismos nuevos y creativos para conceder financiamiento blandos o concesiones, pues de no enfrentarse adecuadamente esta crisis, aumentará el creciente descontento social y sus consecuentes conflictos, que afectarían seriamente nuestras democracias”, matizó Abinader.
Agregó que justo ayer, reunidos con el presidente Biden, la vicepresidenta Harris, los países hermanos miembros del Caricom y nosotros en representación de Republica Dominicana, sostuvimos un encuentro sincero y productivo.
En esa reunión, en que el presidente Biden y la vicepresidenta Harris fueron muy receptivos y demostraron su empatía con la región, se acordó establecer comisiones conjuntas, que de manera urgente trabajen en recomendaciones que empiecen a ser aplicadas de inmediato.
Un segundo tema que afecta a los dominicanos es la seguridad. Los extraordinarios golpes al narcotráfico durante nuestro gobierno han generado una reacción de otros tipos de delincuencia en nuestro país.
Dijo que la colaboración en la lucha contra el narcotráfico no solo debe ser para detener el flujo de drogas hacia el norte sino también para ayudar en la seguridad ciudadana de nuestras naciones, afectadas por las organizaciones criminales que utilizan a nuestros países como puentes.
“Y tercero, y no menos importante, tengo la necesidad y el deber de pronunciarme, como en anteriores ocasiones, sobre la imperiosa necesidad de que la Comunidad Internacional, y en particular los países de Las Américas, actúen sin demora ante la dramática situación por la que atraviesa Haití “, destacó.
“Haití, que históricamente ha pagado muy caro sus deudas con países desarrollados, grita, clama por una acción coordinada que pacifique ese país: el más pobre del hemisferio occidental. Es para mí y nuestro gobierno injustificable que esta comunidad de naciones permita que un Estado, en el medio del continente americano, tenga gran parte de su territorio controlado por bandas criminales”, sostuvo.
“El pueblo haitiano está sufriendo consecuencias de la inestabilidad e inseguridad que han generado estas pandillas y que obliga a sus ciudadanos a buscar otras alternativas para sobrevivir, aumentando de forma significativa la presión migratoria principalmente sobre República Dominicana y en menor medida a otros países de la región”, observó.
Reiteró que “República Dominicana no puede cargar sola con los problemas de Haití. Ya está haciendo demasiado, mucho más de lo que puede. Su situación ha desbordado los límites de un problema migratorio; es, para los dominicanos, un tema de seguridad nacional, por lo que haremos lo necesario, como haría todo país soberano ante una amenaza similar, para asegurar adecuadamente nuestra frontera”.
Manifestó que compete a la comunidad internacional asumir definitivamente un mayor compromiso con el pueblo haitiano, con mayor implicación y, de manera urgente, trabajar por su pacificación y recuperación definitiva.