La patente utiliza tecnología de identificación por radiofrecuencia con el fin de que, cuando una persona quiera beber o comer, se abra automáticamente.

La presentación estuvo a cargo el director del Centro de Innovación Biomédica adscrito al Departamento de Farmacología y Toxicología del Recinto de Ciencias Médicas de la UPR- Abe Schwartz.

El proceso de patentar este prototipo arrancó en diciembre de 2020, pero no se aprobó hasta octubre de este año.

La mascarilla se vende con utensilios como tenedores y cucharas que se pueden esterilizar contra el covid-19.

Su creación nace con la idea de que los comercios lo puedan utilizar y más personas puedan entrar en los restaurantes.

Schwartz detalló que los utensilios adjuntos llevan una etiqueta RFID, mientras que la mascarilla cuenta con un receptor del transpondedor y un servomecanismo para abrir y cerrar una apertura.

La patente fue desarrollada por ocho inventores, cuatro de ellos estudiantes subgraduados, quienes participaron en talleres ofrecidos por el Centro de Innovación Biomédica.

Actualmente, el grupo a cargo de la patente desarrolló dos prototipos de la mascarilla utilizando impresoras tridimensionales, demostrando la viabilidad de la invención.

En Puerto Rico registra una cifra de 151,827 contagios de covid-19 y otras 3,234 muertes a causa del virus.