El epicentro del sismo se registró a 41.8 kilómetros de profundidad y ocurrió a 24 kilómetros de Saiki.
El Servicio Geológico de los Estados Unidos informó este viernes sobre la ocurrencia de un terremoto de 6.3 de magnitud a 24 kilómetros de Saiki, sin que aún las autoridades niponas no emitan alerta de tsunami.
El movimiento telúrico se produjo a las 01H08 (hora local del sábado) tuvo su epicentro a unos 41.8 kilómetros de profundidad, y se reflejó con fuertes sacudidas en una amplia zona del oeste del país y en algunas regiones centrales, sin que se reporten aún víctimas mortales.
Oita city downtown skyline and the TBS Oita city newsroom during the todays earthquake , outtake from the @tbs_news special report #Japan pic.twitter.com/hrKIp6iIWz
— parallel_universe (@ignis_fatum) January 21, 2022
Como tampoco daños materiales severos, pese a que según la Agencia Meteorológica de Japón sus efectos calificaron en un nivel superior a 5 en la escala de intensidad sísmica de 7 que emplean en las prefecturas de Miyazaki y Oita en la isla principal de Kyushu.
Dicha institución, a tenor de las mediciones, alertó sobre la posible ocurrencia de un fenómeno de magnitud similar el cual pudiera golpear las zonas más afectadas por el sismo de este viernes la próxima semana.
En tal sentido pormenoriza la entidad meteorológica que tras el terremoto se percibieron varios temblores de tierra de mucha menor escala y con intervalos de tiempo esporádicos entre ellos en la región afectada.
Por su parte, autoridades locales dieron cuenta de daños a la infraestructura hidráulica en Oita; en tanto la sede del ayuntamiento de la prefectura en Saiki sufrió un corte de energía. Eso sin que las plantas de energía nuclear enclavadas en Kyushu, reportaran avería alguna.
Tras el siniestro, el Gobierno de Kyushu estableció un enlace directo con la oficina del primer ministro en aras de mantener comunicación directa, avaluar posibles daños y recopilar la mayor cantidad de información posible.