Rutas migratorias hacia EE. UU., las más mortales en la región
Las rutas migratorias con destino a Estados Unidos son las que registran la mayor cantidad de muertes en la región de las Américas en los últimos ocho años.
El continente acumula 6,900 fallecimientos, la mayoría de ellos (4,694) en trayectos hacia Estados Unidos, según un nuevo informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
En el registro se incluyen las muertes en la frontera norte de México y aquellos que han fallecido o desaparecido en las rutas marítimas desde el Caribe hacia el país norteamericano.
Solo el cruce fronterizo terrestre entre Estados Unidos y México ha sido escenario de 4,100 muertes, incluidos al menos 114 niños, 360 mujeres y 2,349 hombres.
Más de la mitad (2,114) de aquellos cuyas muertes están documentadas en la base de datos del Proyecto Migrantes Desaparecidos de la OIM murieron por causas desconocidas.
Lo que significa que sus restos fueron encontrados semanas o meses después de que ocurriera su muerte, lo cual «es típico» en regiones remotas desérticas cerca de la frontera, aseguró el organismo.
Al menos 902 personas se ahogaron al intentar cruzar la frontera, en el río Grande, y otras 608 vidas se perdieron por las duras condiciones ambientales y la falta de refugio adecuado.
Los accidentes se cobraron la vida de otras 285 personas que intentaban cruzar la frontera entre Estados Unidos y México, con otras 113 vidas perdidas debido a la violencia durante el tránsito.
Desde el lanzamiento en 2014 del Proyecto Migrantes Desaparecidos, y a pesar de la creciente pérdida de vidas, los gobiernos de los países de origen, tránsito y destino han tomado pocas medidas para abordar la actual crisis mundial de migrantes desaparecidos, destacó la coautora del estudio,
Otras rutas mortales
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) también alertó que las muertes en otras rutas en el continente son «tan mortales» como la frontera entre Estados Unidos y México.
Sin embargo, dijo que documentar esas muertes es «aún más difícil» dada la falta de atención a las rutas menos conocidas.
Como ejemplo, señaló que el proyecto ha registrado 199 muertes en el Tapón del Darién, un cruce de varios días en la jungla en la frontera entre Colombia y Panamá por el que transitaron más de 100,000 personas en 2021.
La OIM describió que los reportes de personas que presencian muertes o pasan junto a cadáveres en ese lugar «están muy extendidos», pero son casi imposibles de documentar más allá de los informes esporádicos de testigos presenciales.
Panorama mundial
Este nuevo informe de la Organización Internacional para las Migraciones reveló que 51,194 personas de diferentes nacionalidades han perdido la vida durante sus trayectos migratorios.
Del total de las muertes documentadas, más de la mitad ocurrieron en rutas hacia y dentro de Europa. La región documenta 29,126 muertes o desapariciones registradas en sus fronteras exteriores en rutas marítimas en el Mediterráneo y el Atlántico, así como en fronteras terrestres como la frontera entre Grecia y Turquía.
La proporción de personas desaparecidas también es mayor en Europa con al menos 16,032 personas registradas. La OIM consideró que estas personas murieron en el mar debido a que sus restos nunca pudieron ser recuperados.
África es la segunda región más peligrosa para las personas migrantes, con más de 9,000 muertes. Otras 6,200 muertesson registradas en Asia. Los menores representan más del 11 % de las vidas perdidas en rutas migratorias en Asia, la mayor proporción en cualquier región.
«Debemos trabajar conjuntamente para prevenir y reducir futuras muertes dando prioridad a las operaciones de búsqueda y rescate, mejorando y expandiendo vías migratorias seguras y regulares y asegurando que la gobernanza migratoria priorice la protección y la seguridad de las personas en movimiento», recomendó la OIM.